Española,
Este señor no te ha robado nada. Tú te has dejado robar si te dejaste engañar.
Hay que espabilar, dejar de creer en los políticos y sus recetas para enriquecerse ellos, y recuperar el ejercicio de las libertades individuales que, por holgazanería, hemos abandonado en manos de estos cantamañanas.
Pero estos cantamañanas sólo engañan a quienes se dejan engañar.

El problema es el doble juego de palabras, sin decir de cara la verdad,porque se tiene que dar la impresión de que se hace lo contrario de lo que se dice. Es decir, USA está imprimiendo papel para pagar sus deudas. Yo, personalmente, lo veo moralmente correcto y económicamente viable.

"Moralmente correcto" porque USA está soportando sobre sus espaldas la guerra contra el islam y ser esa "policía" del planeta que hasta cierto punto (y dentro de unos márgenes) garantiza un determinado nivel de bienestar, derechos y estabilidad económica, social y militar en el mundo. Eso tiene un coste que no tienen por qué pagar los americanos en exclusiva.

Y "económicamente viable" porque la acción natural del mercado será el empobrecimiento del dólar. Es decir, que USA seguirá pagando su deuda imprimiendo billetes al tiempo que el dólar americano se deprecia frente al resto de monedas del mundo. Viable para la economía americana, a quien le conviene un dólar débil (hasta cierto punto) para favorecer sus exportaciones, y también ejerciendo así una presión "artificial" sobre monedas a su vez "artificialmente" depreciadas como el Yuan Chino, que es actualmente el gran "enemigo" económico de USA por su mano de obra barata.

Que la moneda de USA se empobrezca frente a monedas extranjeras no es tan malo como muchos quieren hacer creer. Es un pequeño precio a pagar. El problema en sí no es monetizar deuda (que es una depreciación silenciosa de tu moneda), sino que esta medida no esté debidamente acompañada de una voluntad real de no gastar más de lo que se ingresa.

Son los inversores los que deben castigar ese déficit encareciendo los préstamos de dinero a los USA... pero por mucho que nos pese el verdadero "inversor" son los Gobiernos y sus máquinas de hacer dinero.

En definitiva, sabemos que seguirán imprimiendo billetes para pagar deuda, pero, ¿hasta cuándo y cómo se impondrá el límite?

Este tio no pisará la carcel

El oficio de economista, y más si es premio nobel, es el de engañar al público en beneficio de un gobierno cualquiera que premia el pronóstico favorable del tiempo . Del discurso ambiguo, indescifrable, plagado de contradicciones; según el inventor de la Lógica, siempre se puede sacar cualquier conclusión, válida a los intereses que sirve el dictamen; reinterpretable en el futuro, si conviene, como queriendo significar otra cosa diferente de acuerdo a las circunstancias del momento. La patente de nobel o presidente de una grande institución, da para mentir y decir cualquier barrabasada impunemente.

Este señor antes de ir a la cárcel que nos devuelva el dinero.