El debate de candidatos en Canal Sur ha estado marcado por el auge del PP en todas las encuestas. Un Juanma Moreno disparado en los sondeos se ha convertido en el centro de todas las críticas por ser el adversario más fuerte a abatir. "Represento la moderación, la centralidad, que es donde está la mayoría de los andaluces", ha presumido el candidato popular en varias ocasiones al verse convertido en diana de los ataques.
Con esa idea como mantra, el candidato del PP ha evitado en todo momento confrontar de forma directa con la candidata de Vox, Macarena Olona, a pesar de que le ha interpelado varias veces para que aclare si pactará con el PSOE o con ellos después del 19-J. "Yo le ofrezco ser mi vicepresidente si Vox tiene mejor resultado que el PP", le ha dicho, intentando arrancarle un compromiso a Juanma Moreno, que calificaba de "delirio" su pronóstico.
El candidato del PP se ha zafado en todo momento de la pregunta de Vox, limitándose a defender que "quiere gobernar en una alianza con los andaluces". Como gesto, ha llegado a tenderle la mano para que se la agarrara, sin ser correspondida. El candidato del PP presumía de gestión acusando a Olona de "no saber lo difícil que es gobernar", idea que repetía sin cesar para intentar evidenciar la falta de experiencia de Vox, al tiempo que evitaba responder a la candidata, que ha destacado por su tono más sosegado que en el anterior debate de TVE.
La izquierda, contra Juanma Moreno
El PSOE, Adelante Andalucía y Por Andalucía aprovechaban la coyuntura para ejercer más presión sobre Juanma Moreno, recordándole que ya pactó con Vox para ser presidente. "Aclárelo, los andaluces merecen saber si va a pactar con Vox", le ha reclamado en varias ocasiones el socialista Juan Espadas, que ironizaba con la "declaración de amor" que le había dedicado Olona.
Ante una izquierda alineada en sus ataques contra el candidato del PP, Olona ha salido en un momento dado en defensa de Moreno después de que la candidata de Por Andalucía, Inma Nieto, dijera que la consejera Carmen Crespo estaba imputaba. "Eso es mentira", ha terciado la candidata de Vox, en auxilio del presidente, mientras la de izquierdas empezaba a matizar sus palabras asegurando que "la declaración estaba suspendida".
La coordinación de la izquierda se ha palpado también en sus críticas por "los recortes" de Juanma Moreno, con el objetivo de intentar dinamitar su gestión al frente de la Junta, una de sus principales bazas en esta campaña. Espadas, que en el pasado debate estuvo casi desaparecido, en esta ocasión ha querido atacar desde el primer minuto la política sanitaria del PP.
La sanidad, en el punto de mira
"¡Cuanta complacencia!", ha asegurado en su primera frase y en la que no han faltado grandes hits de la campaña madrileña, que el PSOE lleva utilizando desde la época de Esperanza Aguirre. "Han cambiado la tarjeta de sanidad por la tarjeta de crédito", ha afirmado Espadas, intentando comparar en varias ocasiones a Juanma Moreno con Isabel Díaz Ayuso con ánimo de atacarle.
La candidata de Por Andalucía, que en el anterior debate optó por paralelismos con películas de terror, en esta ocasión se ha decantado por el género de aventuras: "Encontrar un pediatra es más difícil que encontrar el Santo Grial". Aunque para intervención hiperbólica la de Teresa Rodríguez , que llevaba una camiseta con el rostro de García Lorca, ha culpado a Moreno de la ola de calor: "Hoy se están desmayando niños en colegios escolares". Algo que motivó la intervención del candidato de Cs, Juan Marín, que ha asegurado que, cuando gobernaba la izquierda, los padres ya iban con "ventiladores" a los colegios.
El adoctrinamiento en la educación
Uno de los momentos más llamativos del debate se ha producido cuando la masturbación infantil se ha convertido en centro de la polémica. Macarena Olona, sacando un manual, ha reprochado a Juanma Moreno que se enseñe el onanismo a niños de 10 años. Teresa Rodríguez, citando a Woody Allen, ha sentenciado: "Que nadie diga nada contra la masturbación porque es hacer el amor con quien más quieres". Tras la sorpresa de Olona, la candidata de Adelante Andalucía ha empezado a gritar que eso era "educación sexual de la escuela", mientras la candidata de Vox le recordaba que hablaban de niños de 10 años.
Otro momento subido de tono se producía cuando la candidata de Vox ha reprochado los casos de corrupción al PSOE. Juan Espadas ha defendido que el dinero robado por el PSOE de la Junta es "dinero que están recibiendo trabajadores". Cuando Macarena Olona le ha recordado los cientos de millones desviados, Espadas solo ha atinado a decir que estaba en "el presupuesto". En ese momento, volvía la sexualidad al debate cuando Olona le ha recordado que se lo gastaron en "prostitutas y burdeles", ante un Espadas que sólo ha balbuceado algunas palabras ininteligibles.
Sánchez como lastre de Espadas
El bloque de la economía ha seguido la misma tónica, todos contra Juanma Moreno. Inma Nieto ha tratado de vincular su futuro al de Yolanda Díaz, y ha afirmado que la reforma laboral ha "traído la alegría a muchas casas". Espadas, acorralado por las preguntas sobre si subiría impuestos, ha prometido que mantendría la presión fiscal, pese a que al inicio de la campaña había prometido reinstaurar el impuesto de sucesiones.
El candidato socialista, al que PP y Vox han intentado acorralar acusándole de ser "el candidato de Sánchez en Andalucía", respondía a las críticas reprochando la foto con Fadi, la vaca talismán del presidente de la Junta. "Ha venido a hacerse una foto con la vaca pero no a escuchar a los ganaderos", ha afirmado el candidato del PSOE. Teresa Rodríguez ha acusado a Olona de tener 700 euros en acciones de una eléctrica. "Más dinero se ha gastado el Kichi en comilonas", le ha espetado la candidata de Vox.