
El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha tomado la feria de abril como uno de los proyectos que deben estar en el foco durante la presente legislatura, ya que, al poco de llegar al consistorio planteó el referéndum sobre si la feria de la capital hispalense debía volver al formato anterior de los siete días naturales o si la festividad debía permanecer en el de los dos fines de semana comenzando con el Sábado de Pescaito en lugar de con el Lunes de Pescaito.
Una vez resuelto el anterior dilema para los sevillanos y con la vuelta al formato tradicional de lunes a domingo, el líder de los populares sevillanos ha decidido acometer la siguiente reforma que su administración tiene en mente en cuanto a la feria. El Real de la Feria de Sevilla contará el próximo año 2026 con 250 casetas más con el objetivo de atender parte de la demanda de las más de 1.300 peticiones que se encuentran recogidas en la lista de espera.
"Yo no sería partidario de trasladar la feria a otra zona de la ciudad porque ninguna reúne las características de esta zona, pero sí es verdad que anunciaremos, tal y como pase la feria, una ampliación del Real en 2026 con 250 nuevas casetas", ha explicado el alcalde sevillano en una entrevista concedida a Canal Sur este mismo lunes en la que ha justificado esta ampliación como parte de la solución a las peticiones de vecinos y asociaciones que quieren tener su propia caseta.
Dentro de estas peticiones se encuentra la del PSOE, que perdió su caseta en la feria de Sevilla el pasado año después de retrasarse en el pago de la tasa. Cabe recordar que hay asociaciones y grupos de vecinos o familiares que han tardado más de 30 años en conseguir su puesto en el Real de la feria de abril.
Una feria anti-apagones
En este sentido, ha defendido el lugar del recinto ferial, en el que actualmente caben "casi mil casetas", y ha asegurado que estos nuevos 250 emplazamientos se pueden conseguir "retranqueando fundamentalmente la calle del infierno". Una ampliación que es viable conforme a las características del ferial, que se encuentra preparado para apagones como el del pasado lunes, ya que, según ha recordado, los generadores que se instalaron hace dos años podrían surtir la electricidad suficiente como para desalojarla de forma segura.
Aun así, Sanz ha aseverado que "se está llevando a cabo una revisión de todos los grupos electrógenos" para que, si ocurre un nuevo apagón como el del pasado lunes 28 de abril, se pudiese actuar con seguridad, aunque no se podría seguir disfrutando del Ferial.
2.000 millones en impacto
Asimismo, en términos cuantitativos, el primer edil sevillano ha cifrado en alrededor de 1 millón de personas las que pasarán por este recinto ferial. Una cuantía que ya se ha notado en la ocupación hotelera, que se encuentra este lunes por encima del 85% y que se prevé que suba en los próximos días. Todo ello, junto a la Semana Santa de Sevilla, supondrá un impacto económico de 2.000 millones de euros en la ciudad, situando a las fiestas mayores de la capital hispalense como el gran incentivo económico de la ciudad.