El martes 26 de marzo saltaron las alarmas ante el despliegue de la Armada alauita a tan solo 125 km del sur de Fuerteventura. El Gobierno de Canarias no había recibido ningún comunicado al respecto, y se enteró de las inminentes maniobras militares en aguas del Sáhara Occidental a través de una circular enviada por las autoridades marroquíes a armadores y pescadores, donde les anunciaban que desde el viernes 29 de marzo y hasta dentro de tres meses, la zona quedaba excluida de las labores de faena.
Desde ese mismo momento, los socios de gobierno, Coalición Canaria y el Partido Popular, exigieron a Pedro Sanchez información urgente sobre dichas operaciones, mostrando evidente preocupación por el "riguroso silencio" y la "impasibilidad" del Estado ante un asunto tan relevante como el control de fronteras.
Las maniobras comenzaron el Viernes Santo, y este lunes, el presidente canario, Fernando Clavijo, admitió que por el momento no había habido ningún pronunciamiento por parte del Gobierno central, y consideró dos escenarios posibles, por un lado que Marruecos informó a España y España no se lo comunicó al Gobierno canario, o que Marruecos no informó pero esa es una incógnita" que, incidió, tendría que despejar con el ministro de Asuntos Exteriores.
Y como obra de una invocación, tras una semana de silencio y minutos después de las declaraciones de Clavijo, José Manuel Albares se pone en contacto con el presidente de Canarias para calmar sus inquietudes y asegurarle que las maniobras se están desarrollando en "áreas bien circunscritas" y "muy alejadas de aguas españolas".
Así al menos lo han indicado fuentes de Exteriores, que aseguran que tras la conversación, Clavijo ha quedado satisfecho por la explicaciones ofrecidas y que "en breve" mantendrán una reunión presencial para abordar el asunto. Según Exteriores, Albares y Clavijo coincidieron en la importancia para España y Canarias de mantener la etapa actual de buenas relaciones con Marruecos, a la vez que el jefe de la diplomacia española ha reiterado su "disponibilidad permanente" para atender cualquier cuestión relativa a Canarias.
En la conversación, el presidente canario aprovechó para solicitar información sobre la nueva etapa del Gobierno de España en Senegal, así como por la situación en el Sahel. Ante esas cuestiones, el ministro ltrasladó "la información oportuna", que fue agradecida por Clavijo, según explican esas mismas fuentes.