Madeleine Stowe, conocida por sus papeles en películas como El último mohicano y la serie Revenge, ha sufrido uno de los reveses más inesperados de su vida. La actriz fue abordada en la habitación de su casa de Beverly Hills por un hombre a punta de pistola.
La intérprete de 57 años se encontraba durmiendo desnuda junto a su marido, Brian Benden, cuando oyó pasos en la habitación principal. Según relata el portal TMZ y recoge Europa Press, al entrar en el cuarto de baño se topó con un hombre que le apuntó con su arma de fuego en el cuello.
El ladrón exigió a la actriz que le diera todas sus pertenencias de valor. Stowe le entregó todas las joyas que se encontraban en su poder. Algunos medios han valorado el hurto en un millón de dólares.
Poco más tarde E! News anunciaba el arresto del atracador, Walter Cañizares, que en el momento de su detención estaba a punto de cometer otro delito. Al ladrón, que cubría su cara con una máscara de Spiderman, le fue fijada la fianza en 925.000 dólares.
No ha trascendido el estado físico y emocional de Madeleine Stowe. Ahora queda conocer cómo se sucedieron los hechos y cómo un hombre pudo acceder al interior de la residencia sin que saltaran las alarmas.