Una batalla judicial se ha desatado tras el fallecimiento del barítono y miembro del conocido grupo Il Divo, Carlos Marín, hace ya seis meses. Rosa Marín, hermana del artista, acusa a la expareja de este Geraldine Larrosa de "intentar arruinarles" y "llamarles continuamente", hasta el punto de que su madre ha sufrido un ataque de ansiedad. Según cuenta en exclusiva la revista Semana, el motivo no sería otro que la apertura del testamento en la que el cantante legó un piso, valorado en casi 700.000 euros, a la que fue su novia y que todavía tiene pendiente una deuda de 300.000 euros. "La beneficiaria quiere que la casa se le entregue libre de cargas, que sea la madre de él quien pague los atrasos y el monto total", asegura el abogado de la familia a la citada publicación.
Por su parte, Geraldine Larrosa no quiere profundizar demasiado en el tema ya que todo está en manos de sus abogados. La también cantante no entiende que su familia política, con la que asegura que siempre ha tenido buena relación, cargue ahora contra ella: "Son acusaciones falsas". Dolida porque se diga que es una mujer interesada y porque incluso se haya solicitado una orden de alejamiento contra ella para que deje de llamar a la madre de Carlos Marín confiesa que está "triste": " Ya acusaron a los de Il Divo y como no pudo demostrar nada, ahora me viene a molestar a mí. Voy a hacer un escrito con mis abogados (…) Su madre y yo tenemos suficiente confianza para hablar entre nosotras. Todo queda en manos de mis abogados por acusarme de cosas falsas, coaccionarme e insultarme".
Geraldine asegura que llora cada día la muerte de Carlos Marín y destaca lo importante que fue su figura en la carrera de este, no solo a nivel personal durante 19 años, sino también en lo laboral: "Carlos siempre ha dicho en todas las entrevistas que yo editaba, creaba, me encargaba del vestuario…". Por este motivo, ella considera que debería poder usar su imagen para la explotación artística, mientras que su familia no está de acuerdo: "Los derechos corresponden a su madre, que es la heredera. El único director creativo o artístico era Carlos y eso es incuestionable", dice su entorno.
Rosa Marín, hermana del cantante, insiste en que este tensa relación es fruto de la presión que están recibiendo desde hace meses por parte de Geraldine: "Tal es el volumen de llamadas que yo solicité una orden de alejamiento que no se concedió porque la tenía que pedir mi madre. Después de todo lo que ha hecho mi madre por ella… A esa mujer solo le mueve el dinero", dijo a ABC. Se sienten presionados y han visto en la justicia la única salida para que esto termine lo antes posible.