Menú

Isabel Pantoja regresa a su jaula de oro tras su triunfo en Mónaco

Isabel Pantoja regresa a España tras su baño de multitudes en el Baile de la Rosa.

Isabel Pantoja regresa a España tras su baño de multitudes en el Baile de la Rosa.
Isabel Pantoja en Madrid. | Gtres

El Baile de la Rosa de Mónaco ha tenido este año un claro sabor español gracias a la presencia de Isabel Pantoja entre los ilustres invitados. Radiante con un diseño de Isabel Sanchís con motivos florales en tonos fucsias y azules en el que destacaban dos maxi flores en hombro y muñeca, la tonadillera era una de las asistentes más esperadas en la gran noche del Principado. Ella lo sabía y lo disfrutó al máximo.

Sonriente como en pocas ocasiones la hemos visto en los últimos años, la cantante conversó con unos y otros, bailó al ritmo de la música, derrochó complicidad con la artista británica Shirley Bassey -con la que no dudó en cantar a capella el tema 'Bésame mucho'- e incluso pudo conocer y charlar durante algunos minutos con la Princesa Carolina de Mónaco, como apuntan diferentes medios de comunicación.

Un fin de semana de ensueño que llegaba a su fin este domingo por la tarde, cuando Isabel Pantoja abandonaba Montecarlo para regresar a su 'jaula de oro' en Cantora. Al igual que a la ida, la tonadillera ha tenido a su disposición un jet privado -se supone que pagado por el empresario alemán mecenas de las artes Thomas Schmieder, marido de Manuel Dalgó y quienes han invitado a la sevillana al Baile de la Rosa- para disfrutar de una mayor comodidad e intimidad en las dos horas de trayecto que hay entre Mónaco y Jerez de la Frontera.

Y si en la exclusiva fiesta benéfica la viuda de Paquirri se dejó ver pletórica, feliz y radiante, todo ha cambiado nada más pisar suelo español. Una furgoneta de color blanco ha sido la encargada de recogerla a pie de pista para que no se pudiese captar ninguna imagen suya descendiendo del avión privado, y este mismo vehículo la ha llevado hasta un coche con los cristales tintados al que la hemos visto subir muy seria e intentando ocultarse de las cámaras.

Acompañada por su hermano Agustín Pantoja, Isabel ha cambiado de coche apresurada, muy seria, con sus inseparables gafas de sol y haciendo oídos sordos a las preguntas sobre su aplaudida asistencia al Baile de la Rosa.

Temas

En Chic

    0
    comentarios