
Siete años después de su última edición, Gran Hermano regresó este jueves a Telecinco en su versión original con concursantes anónimos. Un adiós que se produjo en parte debido al desgaste de su audiencia, pero principalmente por la pérdida de anunciantes derivada del proceso judicial en el que estaba inmersa la productora por lo ocurrido con Carlota Prado en la edición Gran Hermano Revolution, temporada marcada por los abusos sexuales de José María López hacia Carlota Prado y que se trató de ocultar. Ahora, con los hechos juzgados, se dictó sentencia y se condenó al agresor a 15 meses de prisión, cuatro años de alejamiento y una indemnización de 6.000 euros, el reality vuelve a la parrilla de Telecinco como gran esperanza de la temporada para remontar los preocupantes datos de audiencia de los últimos meses.
Este jueves entró la nueva hornada de concursantes a la casa de Guadalix de la Sierra ante la atenta mirada de más de un millón de personas, 1.053.000, lo que se traduce en un 17,4%de share, un buen dato que supera por mucho la media diaria de la cadena, que este jueves estuvo en un 9,8%. Más mérito tiene hacerlo al emitirse después del Babylon show (706.000 y 5,9% de share este jueves), el fallido programa de Carlos Latre que languidece con cada emisión y cuya cancelación ya suena con fuerza.
Para mitigar el impacto del estreno, Antena 3 emitió el nuevo programa de Joaquín Sánchez y su mujer Susana Saborido, Emparejados, que cada semana recibirá a un matrimonio conocido de nuestro país. Para este primer programa, contaron con la participación de Jesulín de Ubrique y María José Campanario, dos invitados de lujo que sin embargo, no consiguieron generar la suficiente expectación para superar a su principal competidor, marcando un 14,1% de share y 847.000 espectadores.
Por su parte, el cine de TVE consiguió 774.000 de espectadores y 8,7% de share, Cuatro y su Callejeros consiguieron 400.000 de espectadores y 4,8% de share y la película de La Sexta 308.000 y 4,3%.
Gran Hermano, el producto que Telecinco necesitaba
El programa presentado por Jorge Javier Vázquez podría convertirse en el salvador de la temporada para Mediaset, pues su contenido podría repercutir en otros programas de la cadena como ha pasado en ocasiones anteriores. Además, gracias a El debate de GH y demás programas, Telecinco podría volver a recuperar el liderazgo de las noches, pues también cuenta con el buen rendimiento de De viernes, programa presentado por Santi Acosta y Bea Archidona.
Se convierte así en el programa más visto de la temporada para Telecinco después de varios fracasos estrepitosos como el citado show de Carlos Latre, que no ha podido plantar cara a El Hormiguero pese a estrenarse una semana antes, así como otros estreno que tampoco han superado el unidígito como el de la cuarta temporada de Entrevías, con José Coronado, o la vuelta de El rival más débil, esta vez presentado por Luján Arguelles.

