
La última historia viral sobre infidelidad que nos tiene mirando el móvil por si hay alguna novedad tiene como banda sonora el "Viva la vida" de Coldplay, aunque la elección musical respondería más a ese clásico popular que dice "que te han pillao con el carrito del helao" y que tanto suena en las fiestas populares. Precisamente ese gran éxito de la banda británica es el que estaba sonando hace unas horas en el Estadio Gillette de Massacuhussetts, durante la gira americana, del grupo, cuando se produjo la que probablemente se ha convertido en la mayor pillada extramarital de los últimos tiempos.
Estaba Coldplay con su Viva la vida cuando la dichosa Kiss Cam o cámara del beso (dichosa porque hay gente que disfruta al ver que su cara sale en las pantallas a tamaño gigante y hay otros que miramos hacia abajo rezando para que no nos enfoquen), cuando de repente aparecieron en la imagen dos enamorados abrazados que bailaban al ritmo de la música pero que en cuanto se ven en la pantalla se sueltan como si quemaran.
No es para menos. Rápidamente fueron identificados. Se trata de Andy Byron, CEO de la empresa Astronomer, y Kristin Cabot, su directora de Recursos Humanos. Astronomer es una empresa tecnológica valorada en 1,3 billones de dólares que se dedica al análisis de datos y a la Inteligencia Artificial. Pero esto no ha impedido que la imagen se haya hecho viral, haya recorrido el planeta entero en tiempo récord y haya aparecido un misterioso comunicado en redes sociales que han atribuido al protagonista donde pediría perdón a su esposa. Y decimos misterioso porque no está del todo clara la procedencia de este texto, pues hay medios que niegan que haya sido publicado por Byron y aseguran que es el invento de algún tuitero aburrido. En definitiva: no hay registros de que Andy Byron se haya pronunciado públicamente sobre el tema.
"Quiero reconocer el momento que está circulando en las redes y la decepción que ha causado. Lo se suponía iba a ser una noche de música y diversión se ha convertido en un profundo error que ha tenido lugar en un espacio público", empieza diciendo este presunto comunicado, para seguir con las disculpas. "Quiero pedir perdón sincero a mi mujer, mi familia y al equipo de Astronomer. Merecías más de mí como pareja, como padre y como líder". "Esto no es lo que quiero ser ni representar a la empresa que ayudé a construir. Me tomo un tiempo para reflexionar, aceptar las consecuencias y pensar cuáles serán mis próximos pasos, personal y profesionalmente. Pido privacidad para poder afrontar ese proceso".
Crítica a Coldplay y a sus formas
Este extraño comunicado va más allá y señala al grupo musical, quejándose de que le hayan sacado las imágenes de la infidelidad sin el permiso de los implicados. "Quiero expresar el problema que supone que, lo que tenía que haber sido un momento privado, se haya hecho público sin mi consentimiento. Respeto a los artistas, pero deseo que analicemos en profundidad el impacto que pueden tener exponer la vida de los demás en un espectáculo".

Impacto tiene ponerle los cuernos a su señora, que a estas alturas ya sabemos todos de quién se trata, muy a su pesar. Se trata de una profesora de Nueva York de 50 años llamada Megan Kerrigan Byron con la que tiene dos hijos a los que que quizá estaba cuidando mientras él se iba de concierto con su presunta amante.
Megan trabaja como educadora en la Escuela Bancroft y es Directora Asociada de la Lower School & The Hope Graham Program Admision. Por lo pronto parece que ha borrado de un plumazo el apellido de su esposo, Byron, de las redes sociales, o sabemos si para evitar las visitas de curiosos y directamente si es que ya ha iniciado los trámites del divorcio.
Kristin Cabot, yo soy la otra
La otra protagonista de la historia, la supuesta amante, responde al nombre de Kristin Cabot y trabaja como Jefa de Recursos Humanos de la empresa que fundo Andy. Se define como una "líder humana apasionada" y, a diferencia del hombre con el que ha sido cazada, de momento ha preferido optar por el silencio.
El comunicado remata: "Las luces te guiarán hasta tu hogar, y quemarán tus huesos, y trataré de reconstruirte". Como cantó un amigo, escribe. Ese amigo es Chris Martin, el líder de Coldplay, que ha destapado todo el escándalo y que a estas alturas tiene que estar alucinando. Viva la vida.
