María G. de Jaime y Tomás Páramo han hecho de la naturalidad familiar y de la reflexión sobre la educación y los valores una seña de identidad en redes sociales. Lejos de mostrar cada detalle de su día a día, la pareja de influencers elige compartir anécdotas, pensamientos y aprendizajes que descubren en su experiencia como padres, siempre con el objetivo de transmitir aquello que consideran importante para la formación y el crecimiento de sus hijos.
Con la vuelta al cole regresan las rutinas, las clases, los profesores y los reencuentros con los amigos. En este contexto, María G. de Jaime ha compartido con sus seguidores un emotivo mensaje con motivo del inicio del curso de sus tres hijos: Tomás, Catalina y el pequeño Federico, quien este año ha asistido por primera vez a clase.
La creadora de contenido ha confesado que el primer día de colegio de cada uno de ellos siempre le genera una "mezcla de emociones". Por un lado, "emoción por lo que les que les queda por vivir, miedo a que puedan sufrir, pena porque el tiempo pasa demasiado rápido", pero por otro "alegría por verles crecer, rodearse de niños de su edad y aprender en un entorno seguro".
La reflexión de María
Más allá de la parte personal, María quiso lanzar un mensaje de reflexión a otros padres sobre la importancia de inculcar valores desde pequeños: "Creo que los padres tenemos una gran responsabilidad con nuestros hijos, que está en sentarnos con ellos aunque sean pequeños cada año al principio de curso y decirles la importancia de tratar bien al que tienen al lado".
En su reflexión, subraya la importancia de enseñar a los niños a valorar y respetar a los demás, recordando que la diversidad es lo que nos hace únicos. "Todos somos personas, aunque seamos diferentes y eso es lo que nos hace especiales. Algunos más altos otros más bajos, unos más delgados, otros más gordos, unos más callados otros más habladores pero todos todos todos somos personas", enumera.
Señalando que cada persona tiene sentimientos y que "detrás de cada persona hay un corazón que se puede ir a casa triste o contento después de haber estado con nosotros". La influencer subrayó que un gesto o una palabra puede influir directamente en el estado emocional de los demás y pueden llegar a marcar a un niño de por vida, tanto en positivo como en negativo: "Conozco grandes personas (adultos) que de pequeños han hecho daño (seguramente sin querer) porque nadie les dijo esto. Y conozco a adultos que hoy sufren lo que de pequeños les dijeron esos niños que no sabían el daño que podían hacer".
"Yo, como supongo que os pasará a cada uno de vosotros, a día de hoy me sigo acordando de cosas que me pudieron decir sin querer de pequeños. Y por eso cada año me acuerdo de hablar esto con mis hijos", sentencia.
Con este mensaje, María G. de Jaime no solo ha compartido un momento íntimo y familiar con sus seguidores, sino también un recordatorio sobre la empatía, el respeto y la importancia de la educación en valores desde la infancia.