El HuffPost critica a Jacobo Fitz-James Stuart al confundirlo con el tuitero Jacobo Fitz... Edwards

El Huffingtonpost ha confundido a un tuitero, de nombre Jacobo Fitz-Edwards, con Jacobo Fitz-James Stuart Martínez de Irujo, más conocido como Jacobo Siruela, hijo de la difunta duquesa de Alba.

Así comenzaba el hilarante artículo del Huffpost, que llevaba por título: "Revuelo en Twitter con las quejas de uno de los hijos de la duquesa de Alba antes de subir a un avión".

Jacobo Fitz-James Stuart Martínez de Irujo, conocido como Jacobo Siruela por ser precisamente conde de Siruela, ha provocado un enorme revuelo en Twitter al compartir sus quejas por lo que ha visto en una cola de embarque antes de subir a un avión.

Siruela, editor y uno de los hijos de la duquesa de Alba, escribió este viernes a primera hora del día el siguiente mensaje:

"Les confirmo que soy la única persona de la cola de embarque de mi vuelo que lleva chaqueta, corbata o zapatos. Esta profusión de chanclas, camisetas y bermudas debe ser la más fiel imagen de la decadencia de Occidente".

El autor del tuit, sin embargo, no era el conde de Siruela, como decimos, sino un tuitero que responde al nombre de Jacobo Fitz-Edwards.

El digital añadía, en referencia al que ellos pensaban que era el conde de Siruela, que algunos usuarios de la red social consideraban ese comentario del aristócrata una provocación y que, encima, contestaba a las críticas con tono irónico:

Un tuit que se ha hecho viral y que ha provocado todo tipo de reacciones, desde quienes lo consideran una provocación del aristócrata, que además se ha dedicado a contestar a la mayoría de las críticas con tono irónico; hasta quienes se lo han tomado en serio y han cargado contra él, tildándole de ‘clasista’.

El autor del tuit, que no tiene nada que ver con el hijo de la fallecida duquesa de Alba, ha tenido la precaución de realizar un pantallazo del artículo, que fue borrado por el digital:

Es evidente que El Huffpost pretendía con su artículo criticar al aristócrata por su actitud clasista. Pero les ha salido el tiro por la culata, porque el revuelo en Twitter lo ha provocado no la queja de un supuesto hijo de la duquesa de Alba antes de subirse a un avión, como titulaba el artículo, sino el error de confundir a un tuitero con el conde de Siruela.

Jacobo Fitz-Edwards ha pedido al medio que se disculpe con el conde de Siruela por el error, y ha criticado la forma de hacer periodismo sin contrastar un mínimo la veracidad de una cuenta de Twitter. O, en este caso, no conocer los apellidos del hijo de la duquesa de Alba.