Crítica Gastronómica
Tora, festival de niguiris del menú omakase en el restaurante de Mario Hermoso
El restaurante japonés Tora es el primer proyecto gastronómico del jugador del Atlético de Madrid, Mario Hermoso, y cuenta con el chef José Osuna.
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El restaurante Tora, tigre en japonés, nace en el año 2022 con la idea de recrear una taberna japonesa en Madrid, en pleno barrio de Salamanca –calle de Padilla, 5–.
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Empezamos este viaje por Asia con una fantástica crema de cebolla con huevas de salmón, furikake de sisho y trufa.
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Seguimos entrando en calor con otra buena sopa de vieira con setas enoki y miso cítrica.
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Antes de pasar a la selección de niguiris tomamos contacto con el sushi con un muy buen tartar de toro con yema de huevo de corral y salsa ponzu.
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El restaurante Tora nace de la mano del jugador del Atlético de Madrid, Mario Hermoso, que se lanza de esta forma a su primer proyecto en el mundo de la hostelería dado su interés y afición por la cocina y gastronomía.
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Comenzamos con un niguiri de salmón, miso dulce y pile de lima.
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El chef José Osuna termina un niguiri para servir a los diez comensales que están disfrutando del menú omakase.
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En el maravilloso niguiri de corvina, aceite de yuzu y ajo comprobamos esa bilbaína camuflada y elaborada con ingredientes japoneses.
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En la barra omakase tendrás la oportunidad de ver cómo el chef José Osuna elabora en directo los platos.
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Niguiri de hamachi, sisho y lima.
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Niguiri de caballa y vinagre.
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Con un punto minimalista y elegante, cada detalle evoca a la cultura asiática. El restaurante está dividido en dos plantas y tres espacios.
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Niguiri de chicharro amarillo y zumo de gengibre.
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Para terminar esta primera parte, limpiarnos el paladar y prepararnos para los "mejores sabores", llega un picante niguiri de calamar y wasabi, que como bromea el chef, no sin parte de razón, "mientras estéis masticando os va a aparecer una sensación de picor extremo en nariz, que va a subir a los ojos, se va a saltar la lágrima durante 5 o 6 segundos y luego va a dar lugar a un regusto dulzón", un efecto vasodilatador que también llega a las papilas gustativas.
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En la planta baja, además de la barra omakase hay unas mesas bajas para poder disfrutar de la carta de Tora.
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Espectacular niguiri de gamba roja y pimiento de Padrón.
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El chef José Osuna aplicando la técnica japonesa aburi al niguiri de parrocha.
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Buenísimo el niguiri de otoro tostado y vieira.
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José Osuna, nacido en Madrid en 1979, fue criado por sus abuelos, siendo su abuela quien le introdujo el amor por la cocina desde niño. Su influencia japonesa le viene desde pequeño y tras estar varios años trabajando en marketing, en 2022 empezó con Tora. A su lado, Sandra Gacio, que ha llevado a cabo la creación del proyecto, diseño del local y se encarga actualmente de la gestión del restaurante.
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Niguiri de chutoro ahumado en frío al carbón.
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En la planta superior de Tora pueden sentarse hasta ocho personas a comer al mismo tiempo que disfrutan del espectáculo.
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El niguiri de atún con grasa de Wagyu A5 y caviar es puro espectáculo. Con esa sensación característica como si fuese jamón de bellota calentito picando al bajar por la garganta.
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Exquisito también niguiri de foie.
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El último pase es un helado de violeta con yuzu seco y base de sirope dulce, un recuerdo al clásico caramelo de violeta.
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Tora cuenta con una decoración y un ambiente que transmiten paz y tranquilidad.
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Tora en su primer año de vida ya tuvo la recomendación de la prestigiosa Guía Michelín, premio que han mantenido en su segundo año de vida.
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