
Las bodas de 2026 mostrarán una convivencia de estilos muy marcada entre el minimalismo y el llamado rococó glam, dos enfoques distintos que responden a diferentes formas de entender la estética del evento.
El minimalismo propone reducir los elementos decorativos a lo esencial. Se usarán composiciones florales con una sola flor destacada (conocidas como one big flower), mantelerías lisas, y decoraciones botánicas. También se dará prioridad a los espacios abiertos, ordenados y con pocos elementos visuales.
Por otro lado, el rococó glam apuesta por una decoración opulenta inspirada en el barroco francés del siglo XVIII. Se caracterizará por el uso de telas drapeadas, colores intensos como burdeos, dorado o malva, combinados con tonos suaves. Las perlas serán un elemento recurrente tanto en la decoración como en los accesorios del evento.
Bodas unplugged
Una de las tendencias destacadas de 2026 serán las bodas unplugged o bodas sin móviles. Este formato propone pedir a los invitados que apaguen o guarden sus teléfonos durante la ceremonia y/o el banquete para evitar distracciones.
El objetivo es lograr una mayor atención al momento y una conexión más directa entre los asistentes. Para documentar el evento sin que los invitados usen sus dispositivos, se contará con fotógrafos profesionales y la figura del wedding content creator, que continuará consolidándose tras su auge en 2025.
En el diseño del banquete, las infinity tables (mesas largas y con forma serpenteante) ganan popularidad. Esta disposición permite una distribución más flexible de los comensales y favorece la interacción social, ya que no hay ubicaciones fijas ni divisiones formales entre grupos.
Además, estas mesas ofrecen ventajas logísticas y estéticas: se adaptan fácilmente a diferentes espacios, tanto interiores como exteriores, y aportan una imagen visual distintiva y coherente con varios estilos decorativos.
El azul serenity
El color más utilizado en bodas de 2026 será el azul serenity, una tonalidad que transmite calma y se adapta bien a múltiples elementos del evento: desde la decoración floral hasta el menaje, photocalls, copas o elementos del vestuario.
Aunque el blanco y el marfil siguen siendo los preferidos por el 92 % de las novias en España, según el Libro Imprescindible de las Bodas (publicado por Bodas.net con la colaboración del profesor Carles Torrecilla), el azul serenity se incorpora como alternativa o complemento. También se combinará con otros tonos como el rosa cuarzo para lograr contrastes suaves o personalizaciones más marcadas.
Vestidos de novia
La moda nupcial de 2026 también reflejará la dualidad de estilos. Por un lado, el enfoque minimalista se traducirá en vestidos con líneas sencillas, con detalles como aberturas en la pierna, capas y cinturas bajas. Es una opción pensada para quienes buscan comodidad y simplicidad sin renunciar al diseño.
Por otro lado, el rococó glam estará presente con vestidos que incorporan corsets, drapeados, perlas y elementos florales. Este estilo busca mayor presencia visual y personalidad, especialmente en bodas donde la decoración sigue esta misma línea.
A pesar de sus diferencias, ambos estilos comparten un objetivo común: que la elección del vestido represente fielmente el estilo de la persona que lo lleva. Según los datos de Bodas.net, este criterio es prioritario para 7 de cada 10 novias a la hora de seleccionar su atuendo.


