La andropausia, conocida también como "menopausia masculina", es un proceso natural asociado al envejecimiento. Se origina por la disminución de los niveles de testosterona y afecta a los hombres en diversos aspectos físicos, emocionales y psicológicos. A pesar de ser una realidad común, sigue siendo un tema tabú y poco abordado en comparación con la menopausia.
¿Qué es la andropausia?
La andropausia es un término que se refiere al envejecimiento masculino desde el punto de vista reproductivo. Se caracteriza por la reducción progresiva de los niveles de testosterona, hormona producida en los testículos. Esta etapa también es conocida como el síndrome de déficit de testosterona o ADAM, por sus siglas en inglés (Androgen Deficiency Aging Male).
Aunque el descenso hormonal es un proceso natural, sus efectos son notables. La andropausia puede provocar síntomas como fatiga, cambios de humor, pérdida de masa muscular, aumento de peso, problemas de memoria y disminución del deseo sexual. Sin embargo, estos síntomas varían según la percepción y el estilo de vida de cada hombre.
Diferencias con la menopausia femenina
Aunque se compara frecuentemente con la menopausia femenina, la andropausia presenta diferencias significativas. La menopausia ocurre de forma abrupta y definitiva, mientras que la andropausia es un proceso progresivo que puede comenzar a partir de los 30 años y manifestarse de forma evidente entre los 45 y los 55 años.
Además, mientras que las mujeres experimentan una caída drástica de los niveles de estrógeno, los hombres mantienen un descenso más gradual de testosterona. En términos de fertilidad, los hombres no pierden completamente su capacidad reproductiva, sino que esta se reduce. Por otra parte, el diagnóstico de la andropausia es más complejo, ya que no hay un indicador claro como el cese de la menstruación en las mujeres.
Otro factor clave, es la diferencia en la actitud hacia la salud. Mientras que las mujeres suelen acudir regularmente al ginecólogo, los hombres rara vez visitan al médico para revisar su salud hormonal, a menos que sea por problemas relacionados con la próstata.
Principales síntomas de la andropausia
La disminución de testosterona puede generar una amplia variedad de síntomas, muchos de los cuales pasan desapercibidos o se confunden con el estrés u otras afecciones. Algunos de los más comunes son:
- Fatiga crónica y falta de energía.
- Alteraciones en el sueño.
- Disminución del deseo sexual y problemas de erección.
- Pérdida de masa muscular y aumento de grasa corporal, especialmente en la zona abdominal.
- Cambios emocionales como irritabilidad, depresión y ansiedad.
- Deterioro cognitivo, como dificultad para concentrarse o pérdida de memoria.
- Fragilidad ósea, mayor riesgo de osteoporosis y dolores articulares.
Opciones para aliviar los síntomas
Aunque la andropausia no puede evitarse, existen diversas soluciones para mejorar la calidad de vida durante esta etapa. Una de ellas es la Terapia Hormonal Bioidéntica. Este tratamiento consiste en la aplicación de pequeñas dosis de testosterona de forma constante, lo que permite restablecer el equilibrio hormonal y aliviar los síntomas.
Este tipo de terapia no solo mejora la salud sexual, sino también la energía física, la función cognitiva y el bienestar emocional. Además, contribuye a prevenir riesgos cardiovasculares y fortalece los huesos, reduciendo el riesgo de osteoporosis. Sin embargo, este tratamiento debe ser prescrito por un médico tras evaluar el estado de salud del paciente.
Para quienes prefieren alternativas naturales, el uso de suplementos como ashwagandha, maca, valeriana, espirulina y jalea real, que ayudan a mitigar algunos síntomas. Además, técnicas como la silla EmSella, que fortalece el suelo pélvico, y las ondas de choque para mejorar la circulación en el área pélvica, son opciones efectivas para tratar problemas de disfunción eréctil en ciertos casos.
Hábitos saludables para sobrellevar la andropausia
Más allá de los tratamientos médicos, adoptar un estilo de vida saludable es fundamental para minimizar los efectos de la andropausia. Los especialistas recomiendan:
- Mantener una alimentación equilibrada, rica en nutrientes y con un control en la ingesta calórica.
- Realizar ejercicio físico regularmente, combinando actividades cardiovasculares con entrenamiento de fuerza.
- Gestionar el estrés y cuidar la salud emocional a través de técnicas de relajación, socialización y descanso adecuado.
- Favorecer la eliminación de toxinas del organismo mediante una adecuada hidratación y el uso de suplementos naturales, si es necesario.
- Proteger la microbiota intestinal, evitando el consumo excesivo de alimentos procesados y fomentando una dieta rica en fibra.