
Las avellanas son uno de los frutos secos más importantes pero a la vez, quizá más denostados. Son originarias de China y tienen numerosas propiedades beneficiosas para la salud, por lo que en la actualidad se cultivan en todo el mundo. Este fruto seco se caracteriza por tener una forma redondeada con una cáscara dura que encierra una nuez comestible en su interior.
Las avellanas son ricas en nutrientes y se utilizan en la elaboración de una amplia variedad de productos alimenticios. Este fruto seco aporta antioxidantes, grasas buenas, proteínas y micronutrientes, como potasio, magnesio, zinc y vitamina E, por ejemplo, siendo muy buena opción para aumentar la disposición física durante el día.
Propiedades de las avellanas
Las avellanas son una buena fuente de proteína, un nutriente esencial que es importante para el crecimiento y reparación de los tejidos del cuerpo. De hecho, unos 28 gramos de avellanas contienen aproximadamente 6 gramos de proteína. Además, son una buena fuente de fibra, un nutriente esencial que ayuda a regular la digestión y prevenir el estreñimiento. Una porción de 28 gramos de avellanas contiene aproximadamente 3 gramos de fibra.
Tampoco hay que olvidar que una de las principales propiedades y beneficios de las avellanas es que son una excelente fuente de grasas saludables, que son importantes para mantener una buena salud y prevenir enfermedades. Las grasas saludables que se encuentran en las avellanas son principalmente ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, que se han demostrado que reducen el riesgo de enfermedades cardiovasculares y otros problemas de salud.
Pero no solo eso sino que las avellanas también contienen otros nutrientes importantes como vitaminas y minerales. Por ejemplo, son ricas en vitamina E, un antioxidante importante que ayuda a proteger las células del cuerpo del daño causado por los radicales libres. También contienen magnesio, que es importante para la salud del corazón y la función muscular. Además, las avellanas son ricas en ácido fólico, un nutriente esencial para la salud del corazón y el cerebro.
Beneficios de las avellanas para la salud
- Prevención de enfermedades cardiovasculares: El alto contenido en grasas saludables de las avellanas ayuda a reducir los niveles de colesterol y prevenir enfermedades cardiovasculares. Además, combaten los niveles altos de colesterol LDL, de triglicéridos y aumentar el colesterol bueno. Asimismo, gracias a su contenido de vitamina E, uno de los grandes beneficios de las avellanas es que favorece la disminución de la inflamación en el organismo, disminuyendo el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. La presión arterial también se ve beneficiada por el consumo habitual, el motivo es que, debido a su aporte de magnesio, ácido fólico y de potasio, las avellanas también podrían ayudar a controlar la presión arterial.
- Prevención del cáncer: Las avellanas contienen una elevada concentración de antioxidantes, vitaminas y minerales que pueden ofrecer algunas propiedades anticancerígenas. Estos frutos secos poseen un antioxidante, conocido como proantocianidinas, los cuales protegen contra el estrés oxidativo. Además, su contenido de vitamina E y de manganeso protegen contra el daño de las células que podrían causan cáncer, disminuyendo así su riesgo.
- Reducción del riesgo de diabetes tipo 2: Las avellanas tienen un bajo índice glucémico, lo que significa que liberan glucosa en la sangre de manera lenta y constante. Esto ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre y reduce el riesgo de diabetes tipo 2.
- Fortalecimiento del sistema inmunológico: Las vitaminas y minerales presentes en las avellanas, especialmente la vitamina E, son esenciales para fortalecer el sistema inmunológico y prevenir enfermedades.
- Potencia la capacidad cognitiva y la memoria: Las avellanas son ricas en ácido fólico, magnesio y zinc, todos ellos indispensables para el buen funcionamiento neuronal. Además, gracias a su contenido en vitaminas del grupo B, como la B6 y la tiamina, las avellanas benefician el sistema nervioso, mejorando la memoria y la concentración. Estas propiedades las hacen ideales para personas que necesitan un refuerzo mental en su día a día.
- Propiedades antioxidantes y antinflamatorias: Los compuestos bioactivos presentes en las avellanas, como los polifenoles, tienen propiedades antioxidantes y antinflamatorias. Esto contribuye a prevenir el envejecimiento prematuro y a proteger el organismo frente a enfermedades crónicas.
- Control del peso y sensación de saciedad: Las avellanas son ricas en fibra, lo que no solo favorece una buena digestión, sino que también proporciona una sensación de saciedad prolongada. Esto puede ayudar a controlar el apetito y evitar el consumo de alimentos poco saludables, facilitando el mantenimiento de un peso equilibrado.
- Fáciles de incluir en la dieta: Las avellanas pueden consumirse como snack, añadirse a ensaladas, yogures, batidos o incluso formar parte de postres y panes. Su sabor suave y textura crujiente las hacen muy agradables al paladar.