L. D. / EFE.-
Ibarrola ha presentado este lunes a los medios de comunicación el desarrollo de su obra, titulada
Los cubos de la memoria
, que comenzó su desarrollo el pasado 14 de julio y está previsto que se trabaje en la primera parte del proyecto hasta mediados del próximo mes de septiembre. A juicio de Ibarrola, este proyecto "rompe con las barreras del arte abstracto y figurativo y, en general, provoca una ruptura con los ismos hasta ahora conocidos". Esta primera fase se localiza en la zona sur del dique, donde Ibarrolla y sus cuatro ayudantes han pintado ya unas 60 caras de bloques que constituyen el punto de arranque del proyecto.
Por lo que respecta a la segunda parte, esta previsto que sea desarrollada durante los meses de verano del próximo año. El artista ha manifestado que su obra se centra en el paisaje, la cultura y el modo de vida de los llaniscos y que, asimismo, dicha temática tiene una "evidente relación con lo universal en cuanto a que se trata de una actitud de vanguardia que tiene su reflejo en sistemas espaciales de carácter curvilíneo". En palabras del autor, se trata de una codificación extraída de cuevas muy antiguas aplicada al desarrollo de la creatividad moderna. Ibarrola considera su obra como una "investigación estética en profundidad" que desarrolla el trabajo analítico del equipo artístico del 57, grupo del que él mismo fue cofundador.
A su juicio, los "cubos de las memoria" representan una codificación artística que va desde el cubismo hasta las vanguardias históricas más modernas. En cuanto al diseño, el artista bilbaíno confesó que su proyecto no sigue unos patrones estrictos, pues "la obra se va haciendo a medida que se va pintando". El diseño de la maqueta del proyecto comenzó hace aproximadamente año y medio y a la hora de enfrentarse a los "auténticos bloques de hormigón" las cosas cambian y esto es un desafío más para el artista, según ha declarado Ibarrola.
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Por lo que respecta a la segunda parte, esta previsto que sea desarrollada durante los meses de verano del próximo año. El artista ha manifestado que su obra se centra en el paisaje, la cultura y el modo de vida de los llaniscos y que, asimismo, dicha temática tiene una "evidente relación con lo universal en cuanto a que se trata de una actitud de vanguardia que tiene su reflejo en sistemas espaciales de carácter curvilíneo". En palabras del autor, se trata de una codificación extraída de cuevas muy antiguas aplicada al desarrollo de la creatividad moderna. Ibarrola considera su obra como una "investigación estética en profundidad" que desarrolla el trabajo analítico del equipo artístico del 57, grupo del que él mismo fue cofundador.
A su juicio, los "cubos de las memoria" representan una codificación artística que va desde el cubismo hasta las vanguardias históricas más modernas. En cuanto al diseño, el artista bilbaíno confesó que su proyecto no sigue unos patrones estrictos, pues "la obra se va haciendo a medida que se va pintando". El diseño de la maqueta del proyecto comenzó hace aproximadamente año y medio y a la hora de enfrentarse a los "auténticos bloques de hormigón" las cosas cambian y esto es un desafío más para el artista, según ha declarado Ibarrola.
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