
Quedan pocos días para que se estrene en cines la película The Flash dirigida por el director argentino Andy Muschietti y protagonizada, entre otros, por Ezra Miller como Barry Allen, Maribel Verdú como su madre y Michael Keaton como el mítico Batman de Tim Burton. La película genera una expectación tremenda tanto en fans de toda la vida del personaje, como en fanáticos de Batman y DC y también en espectadores que no conocen las bases del universo, pero siente curiosidad por este película de superhéroes basada en uno de los mejores cómics de las últimas décadas.
En esta sección llevamos unas semanas hablando de Flash. La última reseña alrededor del velocista carmesí versó sobre el evento Flashpoint, que es precisamente el cómic en el que se ha basado el director de la franquicia IT para su nueva película. En esta historia, Flash acaba en el pasado y descubre que su madre sigue viva, sin embargo, todo ha cambiado y el universo que el conocía ya no existe. Si no lo arregla, todo lo que él conoce acabará muriendo y desapareciendo para siempre.
Ahora, en la previa de ese estreno cinéfilo que tendrá lugar el 16 de junio, ECC recopila en un tomo de 128 páginas una pequeña serie sobre Flash que, de manera clara y concisa, cuenta en tres pequeñas historias las bases y ADN de este personaje mítico de la factoría DC.

Antes de correr a toda velocidad hacia la reseña, vamos con el apartado técnico: guion de Kenny Ortega, dibujo Ricardo López Ortiz, Juan Ferreyra y Jason Howard, cartoné tapa dura, 128 páginas, editorial ECC y un precio de 17,95 euros.
Vamos con la reseña
Tres historias cortas con la esencia de Flash
"El aperitivo perfecto para la inminente película en solitario del personaje", reza el anuncio promocional de ECC para dar visibilidad al estreno de este cómic que hoy os traemos. La descripción lo deja claro. Estamos hablando de un aperitivo, es decir, de un bocado que tiene como objetivo alimentar tu estómago de fan, pero no pretende ser un solomillo al punto que sacie del todo tu hambre. Partiendo de esa base, este cómic cumple la función que promete sin demasiadas complicaciones. Establece tres historias, tres enemigos a batir y un Flash que por el camino irá luchando contra ellos y contra sí mismo para ir ganando confianza y acabar siendo el superhéroe que todos conocemos.
Ojo, aquí no se habla del origen de Barry Allen sino que se dan pequeñas pinceladas sobre su pasado. Por supuesto tendremos el principal drama de su vida, la muerte de su madre y la acusación que acaba con su padre en la cárcel, y Barry tendrá que ir compaginando su papel de superhéroe en Central City con sus prácticas laborales y su misión de demostrar que su padre es inocente. Además, la historia tendrá a un secundario de lujo como Batman, que hará de mentor de Barry en los momentos en los que el hombre más rápido del mundo duda de si puede de verdad ser el héroe que todos esperan que sea.
Con todo lo dicho anteriormente pueden darse cuenta de que estamos hablando de un cómic muy apañado y solvente que sin demasiadas pretensiones simplemente quiere contar tres historias de Flash y darle un poco más de visibilidad antes de la película. Los más exigentes y fans del personaje quizá busquen algo más elaborado, pero para aquellos que simplemente quieran pasar un buen rato y descubrir qué se van a encontrar en los cines no es ni mucho menos una mala opción. No es Flashpoint, por supuesto, aunque tampoco lo pretende. Por eso les hago la siguiente recomendación: Flashpoint si buscas un primer plato sabroso con guarnición y este hombre más rápido del mundo si quieres una tarde de tapas y picoteo.
A nivel de guion, sencillez. Las historias sirven como excusa para dar fuerza a los valores de Flash y sus puntos fuertes y débiles como personaje. En cuanto al dibujo, mi valoración es parecida. Abre el fuego Ricardo López Ortiz y es él el encargado de juntar en las viñetas a Flash y Batman. Solo por eso su parte es, para mí, la más importante. Su dibujo ,dinámico y muy manga, se adapta perfectamente a Flash. Las escenas de entrenamiento con Batman son más que interesantes.
Os dejo varios ejemplos de Ricardo y también de Ferreyra y Howard:



Conclusión: aperitivo, no primer plato. Para picar, no para saciarse. ¿Eso es malo? Dependerá de cada lector, pero sé de mucha gente que disfruta más de una tarde de tapas que de un restaurante. Lo breve si bueno, dos veces bueno. ¿Parte negativa? Se puede antojar corto y sin demasiada profundidad para aquellos que lleven más tiempo leyendo cómics por lo que creo que es mejor para lectores novatos.

