A lo bueno hay que seguirle la pista y eso hemos hecho durante los últimos meses con la historia de violencia, dioses y acción que tiene la firma de Keanu Reeves, Matt Kindt y Ron Garney. Entre los tres han creado un universo más que interesante con un mercenario con poderes de dios que aparte de ir cortando cabezas y arrancando miembros de sus enemigos busca desesperadamente la razón de su existencia. Estando Keanu Reeves de por medio podemos hablar de un John Wick con superpoderes, es decir, una macarrada de cómic violento que tiene licencia para dejar volar la imaginación en el terreno de lo excesivo.
En las anteriores reseñas tratamos los dos primeros tomos de recopilación con cuatro grapas cada uno. En el primero vimos una buena presentación del personaje y los momentos de más acción y locura asesina. En el segundo, la acción daba paso a más profundidad en cuanto a sus orígenes y a la aparición del malo de la historia. Y en este tercero, tenemos la conclusión de la historia con otro ejercicio intenso de acción y misticismo.
Tras reseñar los tres tomos y el total de las 12 grapas de este Brzrkr, la pregunta es clara: ¿Es tan bueno como dicen? Antes de responder, vamos con el apartado técnico: guion de Keanu Reeves y Matt Kindt, dibujo de Ron Garney, cartoné, editorial Planeta Cómics, 176 páginas y un precio de 17,95 euros.
Vamos con la reseña
Uno de los cómics de acción y mitología del año
Sí, Brzrkr vale mucho la pena. Esa es mi respuesta sincera para responder a la pregunta anterior y describir las sensaciones que he ido teniendo en esta aventura que ha durado 12 grapas divididas en tres tomos. Los amantes de la acción más excesiva y descontrolada tienen una cita con esta historia que además incorpora el sello de uno de los actores que más cuidan los detalles en cada uno de los proyectos en los que se ve inmerso. Keanu Reeves no es un actor que haga una película por hacerla sino que busca la mejor manera de sacar el 100% del producto que tiene entre manos. Es un amante de lo que hace y su pasión, siempre presente en el cine, ahora ha pasado al mundo de las viñetas. Por esa razón y por la presencia de dos grandes artistas como Kindt al guion y Garney al dibujo, este cómic llamó la atención antes incluso de ver la luz en Estados Unidos.
En Brzrkr se nota el cariño y la pasión que sus creadores le han dedicado. Yendo de más a menos, pero sin bajar nunca de una nota media de notable, este personaje con poderes de dios y de profesión mercenario tiene un gran desarrollo a lo largo de los tres tomos que componen su historia. Es cierto que el guion de Kindt no se aleja de los típicos clichés de las películas de acción con un inicio brutal en cuanto violencia, un nudo de transición con origen e historia del personaje y un desenlace que de nuevo se lanza a lo excesivo. Es un argumento muy habitual en este género, ahí no encontramos grandes descubrimientos, sin embargo, hay que hacerlo bien para que el equilibrio entre todas las partes no acabe aburriendo al lector o dándole siempre más de lo mismo. Kindt sabe cómo y dónde separar cada parte para darle dinámica a la narrativa sin perder ritmo y si te lees los tres tomos del tirón el resultado es un cómic de máximo entretenimiento en las 12 grapas que componen su universo.
Dentro del guion también destacan sus personajes que, pese a estar llenos de estereotipos del género, funcionan muy bien juntos. Tenemos al personaje principal con sus tormentos personales y su furia desbocada, a la chica que navega entre el interés amoroso y la investigación, el malo malísimo obsesionado con el poder y al típico amigo que duda entre cumplir con las órdenes que le dan o hacer lo correcto. Y, por supuesto, ejércitos y sectas. Sí, lo sé, es lo típico, pero si es divertido, palomitero y tiene a un Keanu desatado con superpoderes, ¿qué mas da que repita clichés? ¿Acaso John Wick era El Padrino? No, pero sus películas son pura adrenalina y droga para los amantes del género. Por eso, Brzrkr es un producto atractivo y eficaz en el modo y en el fondo.
El dibujo mantiene la misma contundencia y visceralidad de los dos tomos anteriores aunque en este caso veremos un toque más místico en esta tercera entrega. El aspecto mitológico es más evidente ya que la trama lo pide para revelar qué es y de dónde vienen los poderes del personaje. Ojo, el final no es cerrado sino abierto, con todo lo que eso supone. Quizá para muchos ese sea el ‘pero’, que hay mucho que contestar y no demasiadas respuestas. Para otros, por el contrario, más misterio les gustará y sin tener un final de esos con los que acabas con la boca abierta, sí les dejará con ganas de más entregas.
Os dejo varios ejemplos del dibujo:
Conclusión: es un buen final que, no respondiendo a todas las incógnitas, consigue dejar un buen sabor de boca al lector. En líneas generales cumplirá las expectativas de aquellos que hayan leído los dos primeros tomos. Si gustan, disfruten de la lectura.