Un símbolo francés renace de las cenizas, y cinco años después los andamios dejan a la vista cada vez más partes de la renovada catedral de París. Poco a poco ha ido recuperando todos sus detalles y algunos ocultos. La restauración de esta catedral es el trabajo de sus vidas. 500 trabajadores participan diariamente en las tareas de reconstrucción de la estructura de madera medieval del techo y ya han conseguido erigir la nueva aguja. Hasta ahora han gastado unos 550 millones de euros y gracias a donaciones masivas siguen teniendo presupuesto. Está previsto que la catedral vuelva a abrir al público el 8 de diciembre de 2024.

