El castellano es conocido por ser una lengua fácil de aprender para cualquier no hispanohablante, ya que la mayoría de las palabras se escriben como se pronuncian. Esto contribuye a que se sitúe como la tercera lengua más hablada, con más de 600 millones de usuarios según el Instituto Cervantes. Sin embargo, existe una peculiaridad que resalta en su gramática: hay una palabra que no se puede escribir ni pronunciar de manera convencional.
La Fundéu, una organización sin ánimo de lucro resultado de la colaboración entre BBVA y la agencia de noticias EFE, se ha aliado con la Real Academia Española (RAE) para resolver dudas lingüísticas a través de las redes sociales. Hace cinco años, publicó un tuit sobre la única palabra en castellano que no se puede escribir: "salle".
La palabra que se puede decir, pero que no es posible escribir, según las actuales normas ortográficas: https://t.co/FJPvSjZsMY #Wikilengua pic.twitter.com/iGkiAqWKYS
— FundéuRAE (@Fundeu) April 5, 2019
Origen de "salle"
Esta palabra surge de la combinación de la forma imperativa del verbo "salir" y el pronombre enclítico "le". Debido a su naturaleza, se pronunciaría de manera diferente. A pesar de estar registrada en algunos documentos de la Fundéu y pronunciarse como /sá.lle/ o, en zonas con yeísmo, /sá.ye/, la RAE no acepta esta norma ortográfica.
La RAE explica que "nuestro sistema ortográfico no cuenta con recursos para representar la secuencia fónica que implica la articulación de dos eles seguidas dentro de una palabra". De acuerdo con la institución, el imperativo más el pronombre enclítico se forma como "sal+le", y la ortografía del español no contempla esta forma de escritura, ya que el resultado sería una elle que no refleja la pronunciación adecuada.
Cambios ortográficos
En 2010, las Academias de la Lengua decidieron invalidar el uso del guion en este contexto, lo que significa que la opción de escribirlo como "sal-le" ya no está permitida según las normas actuales.
Como alternativas, la RAE sugiere frases como "salir al encuentro de" o "sal a su encuentro". Además, el portal Wikilengua ofrece soluciones creativas como usar un punto medio (l·l), lo que resultaría en "sal·le", o bien usar un punto entre las dos ‘eles’ ("sál.le"). Otras opciones incluyen emplear una barra vertical ("sal|le", "sal/le" o "sal\le"), una coma ("sal,le"), el signo más ("sal+le") o poner la palabra entre comillas («salle», "salle" o ‘salle’).
Este caso pone de manifiesto la riqueza y complejidad del idioma español, donde incluso los detalles más sutiles pueden abrir un amplio debate sobre la norma y el uso, invitando a los hablantes a explorar las posibilidades del lenguaje de manera creativa y flexible.