
Es uno de los guionistas de moda desde hace tiempo en Marvel y no es para menos. Jed Mackay es sinónimo de entretenimiento, pero no solo en plan blockbuster sino también por su profundidad, buenos personajes y un desarrollo de la historia que hace que te enganches a la misma. Todo eso lo ha logrado en la cabecera actual del Caballero Luna logrando que un personaje, habitualmente secundario, tenga una calidad en sus historias que debería ser mucho más valorado de lo que es actualmente.
Estoy disfrutando muchísimo con este Caballero Luna y no solo por lo que hace Mackay en los guiones sino por la maravilla artística que grapa tras grapa, tomo tras tomo, nos ofrece Alessandro Cappuccio. ¡Es una auténtica bestialidad el trabajo visual de este Caballero Luna y su Misión Medianoche! Además, el color de Rachelle Rosenberg hace que luzca de manera espectacular con splash page de poster y escenas de acción donde los dioses y los héroes de este universo brillan, literalmente, con luz propia.

Ahora me meto en terreno spoilers y por qué se ha pasado de llamarse esta cabecera Caballero Luna a la venganza del Caballero Luna, pero antes vamos con el apartado técnico del cómic: guion de Jed Mackay, dibujo de Alessandro Cappuccio, rústica tapa blanda, editorial Panini, contiene Vengeance of the Moon Knight vol. 2 #1-4 USA, 104 páginas y un precio de 14,50 euros.
Vamos con la reseña
¿Qué ha pasado con el Caballero Luna? (Spoilers)
Tenemos tomo 1, es decir, reenumeración y cambio de nombre. Llega la Venganza del Caballero Luna y llega porque tras los cinco primeros tomos, el bueno del señor Luna... murió. Sí, Marc Spector y el resto de sus personalidades caía en el tomo 5 y ahora Marvel inicia una nueva era con el mismo equipo al frente de la cabecera y manteniendo el mismo nivel narrativo y artístico de los cinco cómics anteriores.

En este caso y tras la muerte del Caballero Luna, Mackay le da el protagonismo a sus secundarios. Si en este cabecera conocíamos a la Misión Medianoche que el Caballero creó para proteger a todas las criaturas que podían ser atacadas durante la noche, ahora son sus ayudantes los que toman el relevo para que el legado de Spector no caiga en saco roto. Tigra, dos vampiros llamados Reese y Soldado y el hermano y otro puño de Konshu, Luna de Cazador, serán los encargados de tomar dicho sucesión en el cargo y de investigar la aparición de una misteriosa versión del Caballero Luna, hecho que podría suponer el renacimiento de Marc. ¿Habrá vuelto el verdadero Caballero Luna? Eso es lo que sabremos en este primer arco.
El cómic está muy bien. Mackay tiene además la original idea de dedicar cada una de las cuatro grapas a una sesión de terapia con la psicóloga Andrea Sterman para que cada personaje hable de cómo le ha afectado personalmente la muerte del Caballero Luna. En cada grapa Mackay aporta capas a los secundarios de esta etapa logrando que el lore de la misma siga y siga creciendo. Aquí no tendremos a lo que siempre ha rodeado a este personaje desde su aparición como copia blanca de Batman, pero hemos ganado mucho en la invención de nuevos acompañantes que en unos años serán a buen seguro parte de la gran historia de esta Caballero Luna en los cómics. Por lo tanto, Mackay no solo entretiene sino que aporta elementos nuevos a un personaje con décadas de historia.
Os dejo fotos del apartado visual:


Eso sí, no te lo recomiendo si no has leído anteriormente nada de esta etapa de Mackay. Si te recomendaría que te hicieses con esos cinco tomos y luego entres aquí, porque si lo haces al revés, el dibujo te va a seguir encantando, aunque eso no será suficiente para engancharte. Nadie entra en la cabecera de un personaje si este está muerto, sinceramente.
Conclusión: etapa infravalorada que tiene visos de ser historia viva del personaje. Nunca me canso de ver las maravillas que hace Cappuccio al dibujo. De verdad, cada tomo es un show visual. Por otro lado, Mackay desarrolla todavía más a sus secundarios, mete aquí un misterio y encima abre la esperanza de recuperar al Caballero Luna. Te enganchará si ya lo estabas anteriormente. Si gustan, disfruten de la lectura.