El director Chris Columbus, realizador de la exitosa comedia de 1990 Solo en casa, ha respondido a una de las preguntas que siempre ha suscitado en el público la película que protagonizó Macaulay Culkin. Columbus, que es productor de Nosferatu, que acaba de estrenarse este 25 de diciembre, ha desvelado en una entrevista las conversaciones que tuvo con el productor John Hughes acerca de cómo una familia de clase media pudo permitirse la enorme y lujosa casa donde vivía el niño.
La película, ambientada en los suburbios de Chicago en los años 90, sigue los pasos de un chico, Kevin McCallister, que queda accidentamente abandonado en su casa en plena Navidad y mientras su familia al completo emprende un viaje internacional. Allí será acosado por dos ladrones que, conocedores de la situación, menosprecian al joven y su capacidad para repeler el ataque.
"En aquel entonces, John [Hughes, productor y guionista] y yo tuvimos una conversación al respecto y decidimos cuáles eran los trabajos de los McCallister", dijo Columbus. El creador de la película acostumbraba a ambientar en esos barrios, muy familiares para él, la acción de todas sus obras. Y su pasado como publicista también tuvo su importancia.
Kate McCallister, interpretada por Catherine O'Hara, "era una diseñadora de moda de gran éxito", como lo sugieren los maniquíes en el sótano de la familia. En cuanto a Peter McCallister, personaje incorporado por el fallecido John Heard, Columbus no puede decirlo con seguridad pero sí aporta un detalle fundamental. "El padre podría haber trabajado, según la propia experiencia de John Hughes, en publicidad, pero no recuerdo qué hacía".
Sin embargo, el director -responsable también de las dos primeras películas de Harry Potter- pudo descartar una profesión, que la gente de internet especulaba que podría haber atraído a los criminales Harry (Joe Pesci) y Marv (Daniel Stern) a la casa de McCallister: "No es del crimen organizado. Aunque en ese momento, había mucho crimen organizado en Chicago".