
La franquicia franco, franquismo, fachas o fascistas no descansa en agosto. Este martes, día 5, el Presidente del Gobierno de vacaciones en el palacio de La Mareta (remozado otra vez con un gasto de cerca de 70.000 euros a través de Patrimonio Nacional) ha cumplido con su cita anual y ha puesto en X un mensaje para no olvidar que tal día como hoy, pero de 1939, fueron "asesinadas" las llamadas Trece Rosas, "por defender la democracia, la justicia y la libertad".
Adelina, Ana, Blanca, Carmen, Dionisia, Elena, Joaquina, Julia, Luisa, Martina, Pilar, Victoria y Virtudes fueron asesinadas por defender la democracia, la justicia y la libertad.
Que sus nombres no se borren de la historia.
Que la memoria gane al olvido. #13Rosas 🌹 pic.twitter.com/qEUnSbGALr
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) August 5, 2025
En 2018 Pedro Sánchez hizo lo propio pero se confundió de foto y colgó la de las actrices de la película de Emilio Martínez-Lázaro en lugar de la real.
Sánchez ha dado los trece nombres, sin apellidos para mayor familiaridad, de estas jóvenes y algunos usuarios de la red social hartos de la matraca memorialista han añadido a la lista otras "rosas": "Jésica, Ariadna, Carlota, Letizia, Anaís, Alini, Ely, Tatyy e Iris", "solo algunas de las prostitutas contratadas por Ábalos". Escribía uno, "que sus nombres no caigan en el olvido y no se borren tampoco de la historia". Otros han recordado a los mártires de Paracuellos, sin hueco en la memoria selectiva del socialismo, o a "las Hermanas Mártires Concepcionistas Franciscanas, las Beatas María del Carmen Lacaba y trece compañeras, monjas que fueron cruelmente torturadas, humilladas y asesinadas por milicianos republicanos en 1936".
El mensaje del presidente se ha replicado en las cuentas del PSOE y de las Juventudes Socialistas, organización nieta de la famosa y sanguinaria JSU, las Juventudes Socialistas Unificadas, a la que estaban vinculadas algunas de las "Trece Rosas" y que se encargó del espionaje, la represión, tropas revolucionarias de choque del Frente Popular, y de controlar al menos cinco checas.
El cabeza de las JSU fue Santiago Carillo, que mucho tuvo que ver con las matanzas de Paracuellos. En esos días era el consejero de Orden Público de la Junta de Defensa de Madrid y estaba enterado del traslado ilegal desde los presos de las cárceles madrileñas, en grupos, a las afueras de la capital donde eran depurados. En una reunión con el cónsul de Noruega, Félix Schlayer, éste le pidió que cesaran los miles de asesinatos en retaguardia que… acabaron produciéndose.
Las "Trece Rosas", que estaban vinculadas a esta organización, fueron condenadas a muerte en un juicio con tribunal, mucho más de lo que tuvieron las víctimas de Paracuellos, Aravaca, de la Casa de Campo, José Calvo Sotelo o las de las tapias de los cementerios.
El juicio rápido contra medio centenar de izquierdistas
Se les acusó de colaborar en el atentado que costó la vida de tres personas: del militar, miembro del SIPM (Servicio de Información y Policía Militar), Isaac Gabaldón, de su hija de 16 años, Pilar, y de un soldado que los llevaba en coche por la carretera de Extremadura, Luis Díaz Madrigal.
¿Cuál es el grado de implicación de estas jóvenes con el criminal marxismo-leninismo? El historiador Roberto Muñoz Bolaños en el ensayo Las 13 Rosas. La verdad tras el mito las califica de "guerrilleras". Joaquina López Laffite fue secretaria del Comité Provincial de las JSU.
"En diverso grado, todas eran militantes disciplinadas de las JSU o del PCE y obedecían las órdenes que les daban sus superiores, salvo en algunos casos donde ellos eran precisamente los superiores, como Carmen Barrero Aguado, que formaba parte de la dirección del partido comando activo del PCE".
Asegura que aunque "acumulaban armas y preparaban atentados", trasladaban explosivos, tejían una red de espionaje y delación que costaron tantas vidas nada tuvieron que ver en ese atentado. Igual que los primeros meses de la guerra fueron los de mayor represión, tras la victoria del 1 de abril de 1939, el bando nacional se mostró más inflexible y obsesivo con supuestos intentos de reorganización de los movimientos terroristas izquierdistas, con "una Gran Conspiración Comunista". En mayo se había logrado frustrar otro golpe que iba a perpetrarse contra los asistentes al Desfile de la Victoria.
El atentado hace saltar todas las alarmas y Muñoz Bolaños cuenta que en el juicio "rápido" se hace tabla rasa entre todos los detenidos porque "su muerte quiso ser ejemplarizante".
Junto a ellas fueron fusilados en el cementerio del Este de Madrid 43 hombres, menos recordables, también militantes del PCE y de las JSU.
En los comentarios que le dejan hoy Sánchez en X está que también se apunta los aniversarios de las más de 900 víctimas asesinadas por la banda terrorista ETA. Un 5 de agosto de 1983 asesinó en la localidad guipuzcoana de Oyarzun al policía municipal Manuel Peronié Díaz.


