La Biblioteca Nacional Española (BNE) sufrió el pasado miércoles inundaciones debido a las fuertes lluvias producidas en Madrid. La planta más afectada fue la 12 del depósito general, sin embargo, el agua llegó hasta la décima planta. Han sufrido daños un centenar de libros, sobre todo textos del siglo XX. Estos se han enviado ya a conservación para su secado y su posterior restauración.
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, lanzó un mensaje de tranquilidad este lunes y anunció que su departamento estaba elaborando un estudio para ver el alcance de los desperfectos. Mientras tanto, el director de la BNE, Óscar Arroyo, ha quitado importancia a este suceso. En este sentido, ha asegurado que "los ejemplares dañados son del fondo moderno y se podrán salvar sin problema". Asimismo, ha quitado importancia a los daños del agua alegando que "no es un elemento que destruya y puede llegar a consolidar las fibras".
Firmas de indignación ante lo ocurrido
En las redes sociales un centenar de escritores, historiadores, restauradores y conservadores han firmado un manifiesto exponiendo su "asombro e indignación" en esta situación. Esta protesta, liderada por el escritor Luis Español, exige a las autoridades y al ministro de Cultura tomar medidas técnicas y económicas que protejan la integridad de la institución.
Esta problemática no es nada nueva. En agosto también se inundó la sala de lectura María Moliner, de la Biblioteca Nacional. Las goteras son el día a día de la institución siempre que llueve en Madrid. Por esta razón, los sindicatos han reclamado una reforma total del edificio que, además, lleva 40 años sin restaurarse.
Problemas de goteras desde 2001
Arsenio Sánchez, Premio Nacional de Conservación y Restauración de Bienes Culturales en 2013 y antiguo trabajador de la Biblioteca Nacional, ha dado su opinión sobre la inundación de La Biblioteca Nacional en el programa En casa de Herrero, de esRadio.
Según el antiguo trabajador de la BNE, el edificio de La Biblioteca Nacional sufre un abandono y una descomposición que es evidente. "La biblioteca ha sido abandonada desde hace años por parte del Ministerio de Cultura", ha asegurado. A pesar de ser una de las instituciones más importantes del Estado, "tiene unos presupuestos cada vez más reducidos que no alcanzan los mínimos necesarios".
Además, ha comentado cómo no se ha reformado un edificio que lo necesita de manera urgente. Según ha contado, "se reformó en el año 2001, y desde ese momento sucedían problemas de goteras de forma regular y constante". Alcalá de Henares también se encuentra en una situación "muy preocupante", ha añadido Sánchez.
La Biblioteca Nacional sufrió inundaciones debidas a las fuertes lluvias que dañaron libros
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— Libertad Digital (@libertaddigital) October 18, 2024
Falta de financiación por parte del Ministerio de Cultura
El experto en restauración ha denunciado que la financiación ofrecida por parte del ministerio es insuficiente y no se hacen cargo hasta que no llegan las situaciones de emergencia: "Ha habido una falta de interés por parte del ministerio en designar directores que fueran capaces de buscar los caminos más adecuados para que la BNE se convierta en el centro que debe ser", ha comentado el ex-trabajador de la institución.
Además, ha criticado la forma en la que unas instituciones se apoyan con presupuestos suficientes y, en cambio, a otras "el Ministerio Cultural las abandona".
Para solucionar este problema, Sánchez ha propuesto "hacer una auditoría con las necesidades de la BNE". Así, ha advertido concluyendo que es un error hablar del "dinero que se concede a la Biblioteca Nacional para solventar las goteras cuando ya resulta un problema importante" en la realidad.