
España sigue siendo una potencia mundial en la exportación de armamento. Así se desprende de las cifras que ha presentado este martes en la comisión de Defensa del Congreso de los Diputados la secretaria de Estado de Comercio, Amparo López Senovilla, que tiene entre sus funciones controlar la exportación de armamento, material de seguridad y tecnología de doble uso que realizan las empresas radicadas en nuestro país al exterior.
Las empresas españolas de Defensa exportaron material por valor de 1.976 millones de euros en el primer semestre de 2024, lo que representa un aumento del 13 por ciento respecto a las cifras del mismo periodo del año 2023. Un material que fueron adquirido principalmente por los países de la Unión Europea, que representaron un 61 por ciento de las ventas, con una cuantía económica de 1.212 millones de euros.
En lo que respecta al tipo de material, la gran mayoría se encuentran en la categoría 10 de exportaciones militares, donde se encuentran las aeronaves, algo habitual año tras año porque en España tienen fábricas de algunos de los consorcios aeronáuticos más importantes del mundo, como es el caso de Airbus. Se exportaron aeronaves, repuestos y equipos asociadas a ellas por valor de 1.339 millones, por lo que representó cerca del 70 por ciento de todo lo exportado.
López Senovilla ha explicado que desde la invasión rusa de Ucrania se ha puesto especial cuidado en que ningún material puede ser exportado a Rusia ni empleado en suelo ruso, en cumplimiento de las sanciones de la Unión Europea sobre el Gobierno de Moscú. Para ello, se ha pedido a todos los compradores un certificado de último destino y otorgar a las autoridades españolas la capacidad de verificar tras la entrega que se cumple con los términos acordados.
Respecto a las denegaciones de exportación de material militar, ha especificado que durante los primeros seis meses del año 2024 se rechazaron 14 solicitudes relacionadas con exportaciones a Cuba y que estaban relacionadas con el envío a la isla prisión de pistolas y municiones de diferentes calibres.
La secretaria de Estado ha detallado que las operaciones de armas de caza y deportivas supusieron un montante económico de 68,2 millones de euros, lo que representó un descenso en ventas de un 8,5 por ciento respecto al primer semestre de 2023. Sobre el apartado de otro material, en el que se incluye, por ejemplo, el material antidisturbios, las cifras de ventas fueron de 1,4 millones de euros, siendo Francia, Marruecos y Mauritania los principales clientes.
En lo referente al material de doble uso, ha dicho que las cifras de exportación alcanzaron 215 millones y se centraron fundamentalmente en la categoría de tratamiento de materiales y sustancias químicas, microorganismos y toxinas. Los principales clientes fueron Arabia Saudí, Francia y China. Se denegaron once operaciones de exportación, en su mayoría sistemas remotamente tripulados (RPAS), debido al riesgo de que fueran desviados a países con sanciones de la UE.
Para contextualizar la situación de nuestro país en el mercado mundial de armamento se puede tomar como referencia el último estudio del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés), que decía que España fue el noveno mayor exportador mundial de armamento en el periodo 2020-2024.

