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Fórmula 1

Ferrari, una década de decepciones

El título conseguido por Raikkonen en 2007, favorecido por la lucha interna de Alonso y Hamilton en McLaren, fue el último mundial de pilotos.

El título conseguido por Raikkonen en 2007, favorecido por la lucha interna de Alonso y Hamilton en McLaren, fue el último mundial de pilotos.
Fernando Alonso, en el GP de Bahrein. | EFE

El noveno y décimo puesto de Fernando Alonso y Kimi Raikkonen en el GP de Bahrein ha disparado las alarmas en Ferrari. El coche del piloto español no funciona y hasta el presidente de la escudería italiana, Luca Cordero di Montezemolo, no pudo aguantar hasta el final de la carrera y no dudó en mostrar públicamente su decepción con el rendimiento del coche.

"No estoy contento con Ferrari, por eso estoy aquí. Me parece que no hay mucho que ver. Somos muy lentos en recta, hay una falta de potencia. No esperaba mucho de esta carrera, pero sí algo más. Me duele ver un Ferrari tan lento en recta. Tenemos que trabajar, es necesario que los ingenieros nos pongan un paso por delante", afirmó Montezemolo.

Lo cierto es que viajó hasta el circuito de Sakhir para reclamar al presidente de la FIA, Jean Todt, y al dueño de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, un cambio en la reglamentación. "En estos momentos hay tres problemas, uno que no podemos tener un F-1 de verdad porque esta es la fórmula de la energía, de la economía en el combustible. En la Fórmula 1 se debe ir al límite de la primera a la última vuelta. Si hay un motor que consume menos, que hagan la carrera con menos combustible si quieren, pero esa no es la esencia de este deporte. Al público no le gusta ver un piloto como si fuera un taxista que tiene que cuidar el consumo de gasolina".

Sin un coche ganador

Sin embargo, los problemas de Ferrari no se reducen a esta temporada. La escudería italiana acumula ya una década en la que ha perdido la iniciativa. Sus monoplazas van por detrás en innovación y mejoras y no han conseguido hacer un coche ganador desde que Michael Schumacher anunciase su primera retirada en 2006. El alemán había dejado de ganar los dos últimos campeonatos ante un joven Fernando Alonso que despuntaba con Renault y Ferrari ya daba los primeros síntomas de su falta de adaptación a los cambios de reglamento.

Comenzó entonces un largo historial de decepciones, endulzado por el campeonato de Raikkonen en 2007. El finlandés no contaba con el mejor coche pero se aprovechó de la lucha interna de Hamilton y Alonso en McLaren. A la temporada siguiente Massa perdió el título en la última carrera en Brasil ante el inglés.

Alonso iguala su peor inicio

La llegada de Fernando Alonso en 2010 prometía un cambio de rumbo en el equipo del Cavallino Rampante, pero desde que el asturiano llegó nunca ha contado con el monoplaza más competitivo. Esa temporada fue en la que más cerca estuvo de hacerse con el campeonato. Alonso afrontó la última carrera con ocho puntos de ventaja sobre Vettel pero acabó cayendo ante el poderío del Red Bull y una estrategia equivocada.

Hasta este año, la temporada 2011 había sido la del peor comienzo del español, que sumó 26 puntos en las tres primeras carreras del año, algo que ha igualado esta campaña. En 2012, la decepción continuó y el Ferrari fue el tercer mejor coche por detrás del poderoso Red Bull y McLaren. Y el comienzo prometedor de 2013 (43 puntos) se fue apagando a lo largo del campeonato hasta sufrir el aplastante dominio de Vettel en la segunda mitad de la temporada. Ferrari aspiraba a ser, junto a Mercedes, uno de los equipos más beneficiados con el cambio de normas de este año. Pero Alonso empieza a ver cómo se le escapa otro mundial si la situación no da el vuelco que lleva esperando desde que llegó.

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