El AS Mónaco de Leandro Jardim ha dado un salto de calidad en relación al equipo que la pasada campaña no pudo oponer oposición al dominio aplastante del PSG de Laurent Blanc. Una de las grandes diferencias del equipo de la pasada campaña en relación a este año es la presencia del delantero Kylian Mbappé Lottin.
De padre camerunés y madre argelina, el joven delantero nacido en Bondy (Francia), el 20 de diciembre de 1998, se ha consolidado como la gran revelación del fútbol europeo esta campaña, aprovechando la confianza que ha depositado en él su entrenador desde que lo subiese al primer equipo la pasada campaña.
El joven Kylian Mbappé se formó en el equipo de su ciudad, el Bondy, donde trabaja su padre y, tras un breve paso por ese vivero de jugadores que es el Instituto Nacional de Fútbol de Clairefontaine (el denominado Centre Technique National Fernand-Sastre), fichó por el AS Mónaco en 2013.
Los problemas con las lesiones de varios de los delanteros del equipo monegasco hicieron que Jardim subiese al primer equipo a su prometedor goleador, haciéndole debutar el 2 de diciembre de 2015 en el empate de los monegascos en Caen (1-1). Fue algo testimonial, ya que apenas dispuso de 5 minutos tras reemplazar a Fábio Coentrao en el minuto 88.
Mbappé jugaría 11 partidos en total en la Ligue 1 de la temporada 2015-16, marcando su único gol el 20 de febrero del año pasado, en la victoria del AS Mónaco ante el Troyes por 3-1. Además, debutó en la Copa de Francia, la Copa de la Liga y la Europa League, jugando un partido en cada competición, dando tres asistencias de gol en toda la temporada.
La recuperación de Falcao y la presencia de Valere Germain, junto a Guido Carrillo, como trío de delanteros abría la puerta a una posible salida de Mbappé para disponer de más minutos esta temporada.
Su brillante actuación con la Selección Francesa Sub’19 el pasado verano, en el que Les Bleus se proclamaron campeones tras golear a Italia por 4-0 en la final, marcando 3 goles en los 5 partidos disputado, provocó que el Manchester City hiciese una oferta récord por un jugador que apenas tenía 18 años: 40 millones de euros. El AS Mónaco rechazó la oferta, cubriéndose las espaldas en caso de que la lesión de uno de sus delanteros les dejase en cuadro para la disputa de las 4 competiciones de esta temporada y el jugador, que firmó su primer contrato como profesional en marzo de 2016 (acaba en junio de 2019) empezó la temporada junto al resto de sus compañeros, disponiendo de sus primeros minutos de la temporada en el debut del equipo en la Ligue 1, el pasado 12 de agosto.
La Eurocopa y la Copa América habían hecho que muchos de los titulares estuvieran o faltos de rodaje o con problemas físicos, y Jardim le dio la titularidad de ser titular, haciendo pareja con Guido Carrillo. Sin embargo, con el partido 0-2 abajo, el portugués dio la responsabilidad de remontar el partido a uno de sus referentes, Bernardo Silva, un mediapunta de enorme talento que es el cerebro del equipo en ataque, mandando a Mbappé al banquillo antes del descanso. Los rojiiblancos acabaron empatando el partido en los minutos finales precisamente con gol del internacional luso.
Pasó mes y medio hasta que el joven jugador tuvo la oportunidad de volver a jugar, debutando además en la Champions League. El equipo monegasco caía en su estadio ante el Bayer Leverkusen en partido de la segunda jornada de la fase de grupos. En el minuto 73, Jardim quitaba a uno de sus dos mediocentros, Bakayoko, y metía a Mbappé, que acabó ayudando a que el equipo empatase en el tiempo de descuento.
Habían pasado casi dos meses desde que había jugado en el primer partido de liga cuando Mbappé volvió a jugar. Esta vez, salió para reemplazar a Germain en la goleada por 7-0 ante el Metz, en partido jugado a domicilio el 1 de octubre. Apenas dispuso de 8 minutos.
El parón de selecciones en octubre fue un aliado para que Mbappé se consolidase con el primer equipo del AS Mónaco. Mientras que muchos de sus compañeros estaban ausentes, disputando compromisos con sus selecciones, el joven jugador francés aprovechó para ponerse a tope, esperando que Jardim volviese a confiar en él.
Ante el Montpellier, con Radamel Falcao de vuelta en el equipo, Jardim apostó con sacar de titular a Mbappé en un encuentro jugado el 21 de octubre pasado y el jugador cumplió con creces, marcando su primer gol de esta temporada y siendo uno de los destacados del equipo en la goleada por 6-2. Era la 10ª jornada y desde entonces, Mbappé únicamente se perdió un partido (en la jornada 14), disputando 22 de los 30 encuentros de la competición gala (los mismos que Falcao) y anotando 12 tantos (los mismos que Falcao, si no contamos los 4 penaltis que ha marcado el cafetero).
El 14 de diciembre, Mbappé lograba su primer hat-trick con el AS Mónaco, en un partido de los octavos de final de la Copa de la Liga que los del Principado ganaron ante el Rennes por 7-0. Sin embargo, ha sido en febrero pasado cuando el jugador ha explotado, poniéndose en el centro de todos los rumores sobre el interés de los grandes clubes del fútbol europeo gracias a un nuevo hat-trick, este ante el Metz en la Ligue 1, unido a su decisivo gol en la victoria ante el Montpellier una jornada antes y, sobre todo, sus dos goles en la eliminatoria ante el Manchester City (uno en cada partido), tantos decisivos para que su equipo haya eliminado a los hombres de Guardiola.
Tras jugar 32 partidos oficiales con su equipo esta temporada, Mbappé ha marcado 19 goles y dado 11 pases de gol a sus compañeros, promediando un gol en sus últimos 12 partidos. Con 1671 minutos disputados, sus cifras goleadoras son espectaculares, marcando un gol cada 88 minutos (93 minutos para marcar un gol en la Champions League).
Convocado por Didier Deschamps para jugar con la selección francesa absoluta, la vida le sonríe a Mbappé, que difícilmente jugará en el Principado de Mónaco la próxima temporada. Su instinto goleador, su polivalencia, su velocidad y su desparpajo hacen que, con sus condiciones, todos los grandes clubes europeos se vayan a pegar por ficharle.
Para muchos analistas, la comparación con Thierry Henry, que también explotó en el conjunto del Principado, es inevitable. Sin embargo, aquel Henry que se presentó en sociedad con un doblete frente al Bayer Leverkusen, en un partido de la fase de grupos de la Champions League en 1998, dista mucho de ser el jugador que Mbappé es a día de hoy. Por potencia, por calidad, por velocidad y por clase, los dos jugadores tienen cierto parecido, pero ni el físico (Henry era más alto y espigado con sus 188 cm, mientras que Mbappé tiene un tren inferior más poderoso y es 10 centímetros más bajo) ni por la consistencia (Henry no fue capaz de marcar los 12 goles en los últimos 12 partidos, la mayoría decisivos, que ha marcado Mbappé) hacen que la comparación sea injusta para los dos jugadores.
Curiosamente, el de Bondy le quitó el récord de precocidad goleadora al excapitán del Arsenal, convirtiéndose en el jugador más joven en lograr un gol como profesional para el AS Mónaco (17 años y 62 días). No es la única marca que tiene en su poder: con su gol en el Etihad Stadium, en el partido de ida ante el Manchester City, se convirtió en el segundo jugador francés más joven en marcar en la Champions League, por detrás de Karim Benzema. Además,con 18 años y dos meses, es el jugador francés más joven en marcar 10 goles en la Ligue 1.
El futuro nos dirá si Mbappé cumple con todas las expectativas que ha creado o se queda por el camino, como tantos otros. Para cualquier equipo grande, como el Real Madrid, la apuesta por un jugador tan joven es arriesgada, pero el francés tiene la ventaja de venir de una familia vinculada al deporte (sus padres practicaron deporte a nivel competitivo y su hermano adoptivo juega en el Rennes) y en caso de fichar por el Real Madrid (con 14 años, ya estuvo en Valdebebas, recomendado por el propio Zidane), compartiría vestuario con su gran ídolo: Cristiano Ronaldo.