"Cuando quería pasar es porque había espacio suficiente para pasar y en cuanto ve (Gelete Burka) que yo paso, se echa a un lado y nos enganchamos. Creo que no es antirreglamentario, pero el estadio se ha vuelto loco y he decidido no dar la vuelta", ha indicado Rodríguez a TVE.
La catalana ha lamentado la situación "un poco contradictoria" de que el estadio le estuviese "silbando" y no pudiese celebrar su título, y además ha reconocido sentirse "mal" por la africana, ante la que se disculpó al término de la prueba. "Es una situación un poco desagradable", ha advertido.
Además, la campeona de España de la distancia ha subrayado que temía por perder la medalla vistos otros casos producidos en los Mundiales. "Es un campeonato raro en ese sentido y hay muchas descalificaciones raras", ha afirmado Rodríguez.
Posteriormente, ante los medios de comunicación, ha relatado que si la etíope "no se hubiera caído no habría pasado nada". "Estaba tranquila porque no soy una atleta que si no ve claras las cosas adelanta y lo hice porque había paso", ha reiterado.
"Tengo la conciencia tranquila. Estaba contenta por mí, pero sabía que lo de ella era gordo porque optaba a ganar. No he cometido ninguna falta, pero cabía la posibilidad de que me descalificasen", ha sentenciado la española.