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Los mercados castigan a España: el Ibex se desploma el 4,19%

Las dudas sobre la situación griega y el posible contagio en otros países de la UE empiezan a pasar factura a España. El Ibex se desplomó este martes por encima del 4% y el bono español a diez años mantiene los 100 puntos básicos de diferencia con el alemán.

El parqué madrileño cerró la sesión del martes con una fuerte caída del 4,19%, la segunda mayor caída del año, que situó al selectivo en la cota de los 10.480,9 puntos, arrastrado de nuevo por el temor a un posible contagio de los problemas de Grecia a la economía española.

El Ibex volvió a desplomarse tras cerrar dos días con leves ganancias y se hundió en niveles mínimos. Además, la rebaja del 'rating' a Portugal y a Grecia por parte de Standard & Poor's aumentó el pánico entre los inversores ante la posibilidad de que el próximo país afectado por un recorte en la calidad crediticia sea España.

La agencia de calificación crediticia rebajó la nota a largo plazo de la deuda de Grecia a 'BB+' desde 'BBB+', lo que coloca la deuda helena en grado especulativo o 'bono basura', con perspectiva "negativa" y deja abierta la posibilidad de más recortes.

En este contexto, los valores que registraron mayores descensos fueron los bancos y el sector de construcción. Los recortes los lideró Sacyr Vallehermoso (-7,19%), seguido de Ferrovial (-6,57%), Banco Popular (-6,09%), BBVA y Bankinter (-5,74%), Banco Santander (-5,41%), Banesto (-4,48%) y Banco Sabadell (-4,02%). Telefónica, por su parte, perdió un 3,43%.

Entre los descensos también se situaron Mapfre (-5,01%), FCC (-4,95%), Abertis (-4,81%), OHL (-4,22%), Repsol YPF (-3,96%) e Iberdrola (-3,95%). El único valor que escapó a los descensos fue Iberdrola Renovables, que cerró con un repunte del 1,05%.

En Europa, los principales indicadores también cerraron con descensos, aunque algo menos pronunciados que Madrid. En concreto, París perdió un 3,82%, seguido de Francfort (-2,73%) y Londres (-2,06%).

Analistas


Los analistas consultados por Europa Press explican que las caídas en los mercados continuarán mientras dure la incertidumbre sobre el plan de rescate de Grecia, aunque descarta que vayan a ser tan acusadas.

En concreto, Nuria Álvarez, de Renta 4, explicó que todo depende de lo que finalmente decida Alemania, tras elevar ayer sus exigencias para la puesta en marcha del plan, y de la fecha de ejecución del mismo. En este sentido, resaltó que las declaraciones del BCE también contribuyeron a generar desconfianza y reavivaron el temor sobre las posibles similitudes entre el país heleno y España.

El vicepresidente del Banco Central Europeo, Lucas Papademos, puso a España como ejemplo de deterioro fiscal, junto con Grecia e Irlanda, por el aumento del déficit público registrado en 2009, hasta el 11,2% del PIB. Álvarez subrayó el foco de atención de los inversores está exclusivamente en Grecia y que los datos macro y los resultados empresariales han pasado a un segundo plano aunque son buenos.

Por su parte, Marián Fernández, responsable de estrategia de Inversis Banco, también coincidió en destacar que la volatilidad continuará a largo plazo y que afectará en mayor medida al Ibex, donde la banca tiene un peso importante, pero recalcó que la puesta en marcha del plan de rescate puede poner algo de tranquilidad en el mercado.

Asimismo, los expertos señalan que el temor de los mercados ante un impago de la deuda soberana de Grecia encarecía la deuda española a corto plazo y penalizaba severamente a la banca española. Las reticencias de Alemania de aplicar el plan han suscitado el nerviosismo de los inversores europeos ante la posibilidad de que Grecia no pueda hacer frente a sus obligaciones de pago, lo que dispara los intereses de la deuda que emite y el precio de los seguros de impago, conocidos como CDS (Credit Default Swaps).

Los analistas subrayan que la banca española se está viendo claramente penalizada en los mercados como tenedora de gran parte de la deuda de los Estados, sobre todo del español, en carteras que utiliza para hacer 'trading' y compensar los tipos de interés.

En el mercado de divisas, el euro pierde posiciones frente al dólar y al cierre de la sesión bursátil del cambio entre las dos monedas quedó fijado en 1,3221 unidades.

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