Lavados de cara

La noticia más destacada y comentada en portadas y editoriales de prensa de este viernes es la decisión del CGPJ de remitir el caso del narcotraficante fugado al fiscal general del Estado. Un sondeo que sitúa a Rajoy como el ministro más valorado y como candidato preferido para sustituir a Aznar, la inminente devaluación del peso en Argentina y el aumento durante el pasado año del precio de la vivienda en un 8,9% son otras noticias muy destacadas por los principales periódicos impresos.

El escándalo motivado por la decisión de poner en libertad bajo fianza al “narco” Carlos Ruiz Santamaría tres semanas antes de su juicio y su fuga nada más salir de la prisión ha llevado a la mayoría de la prensa a celebrar la decisión del CGPJ de remitir el caso a la Fiscalía General. Aunque de forma insuficiente, hay diarios que critican, no obstante, la tibieza de las medidas adoptadas.

Así, ABC señala que, a pesar de su decisión, la comisión permanente del CGPJ ha omitido toda precisión sobre cuáles son los hechos y las calificaciones jurídicas que justifican la doble investigación, penal y disciplinaria y considera “contradictorio que el acuerdo evite juicios sobre la calificación penal indiciaria de los hechos y, al mismo tiempo, se base en un artículo de la Ley Orgánica del Poder Judicial, el 409, que requiere del Consejo que aprecie la apariencia delictiva del comportamiento del juez. “Al no hacerlo así- asegura ABC- se está pidiendo al fiscal una indagación indeterminada, que incluso alcanza al psiquiatra de la cárcel de Valdemoro, funcionario ajeno al Poder Judicial y cuya referencia en el acuerdo de la Comisión debería estar justificada de manera mucho más precisa. Lo mismo cabe decir –continúa el diario- del acuerdo de traslado a la Comisión Disciplinaria, que debería estar basado en datos o hechos concretos y ajenos a la naturaleza jurisdiccional de la excarcelación, hechos que, sin embargo, han sido omitidos”.

El Mundo, por su parte, recuerda en su editorial que fue ese diario quien reveló que dos de los tres magistrados bajo sospecha –Ollero y López Ortega- desconocían todas las circunstancias del caso y que se fiaron del criterio del ponente -Carlos Cezón- por lo que ni siquiera hubo deliberación. También recuerda este diario que esa Sección es la misma que decidió, por dos votos contra uno, poner en libertad a los miembros de Ekin, revocando el auto de prisión del juez Garzón. No obstante este diario señala que resultará harto difícil imputar de prevaricación a los magistrados, dado que la toma de resoluciones injustas a sabiendas por parte de los jueces es un delito que, salvo que hubiese cohecho, es muy difícil de probar por su componente subjetivo.

Más optimista se muestra este diario respecto al expediente disciplinario, que no requiere dolo, por lo que reclama una sanción ejemplar. No obstante, el editorialista advierte de que este procedimiento quedaría paralizado hasta que no terminase la investigación penal.

El País, finalmente, ahonda en el escándalo de la decisión de poner en libertad provisional al narcotraficante pese al evidente riesgo de fuga: “De los datos conocidos es imposible no deducir indicios de lo que en cualquier oficio se consideraría grave negligencia profesional. Incluso si el informe psiquiátrico –sobre el que Instituciones Penitenciarias también ha abierto una investigación- hiciera inexcusable liberar al preso, tenían que haberse tomado las precauciones obvias: una fianza mayor, control diario -y no quincenal- del reo, comprobación del domicilio indicado y vigilancia del mismo, como había pedido el fiscal”.

Como queda de manifiesto, los diarios no sólo citan muy de pasada el papel que en este escándalo ha desempeñado el sospechoso informe psiquiátrico en la excarcelación del reo sino que omiten informar de un dato tan relevante como que el psiquiatra responsable del mismo estaba expedientado por no cumplir correctamente con su trabajo; una información facilitada el jueves por la Cadena COPE, la cual también informó que de los siete psiquiatras que trabajan para Instituciones Penitenciarias en Madrid, todos están expedientados.

Por otra parte, aunque justificada y de agradecer, sorprende la virulencia desatada por esta decisión judicial como si fuese el primer caso de fuga favorecida por la puesta en libertad provisional del reo. Sólo en el ámbito del terrorismo, han sido tan frecuentes esos casos que muchos estudios académicos colocan a la prodigalidad en su concesión como uno de los factores determinantes que han impulsado a esporádicos participantes en la kale borroka a espera de juicio a pasar a la clandestinidad y la militancia en ETA. Y eso por no hablar de la cantidad de delitos que se cometen en este país durante los permisos carcelarios concedidos a presos ya condenados; una medida judicial tan irresponsablemente administrada como con tan similares efectos perversos.

A Mariano Rajoy, cuya responsabilidad como ministro bien podría haber sido señalada por la prensa ante la bochornosa situación que se vive en Instituciones Penitenciarias, también sale de rositas en el editorial de La Razón dedicada a comentar cómo se ha disparado los índices de delincuencia. El ministro, sin embargo, es hoy noticia por el sondeo que publica El Mundo donde se asegura que es el miembro del Gobierno más valorado por los españoles y el preferido para suceder a Aznar como candidato del PP a la presidencia. La verdad es que el cargo de ministro del Interior casi siempre ha mejorado la valoración pública de quien lo ocupa, pero Rajoy no debería confiar en esta circunstancia y en las formas amables que emplea para seguir liderando los índices de popularidad. Por otra parte, es significativo de Rodrigo Rato siga siendo, para el electorado popular, el mejor candidato para suceder a Aznar y el segundo ministro mejor valorado a pesar del reciente escándalo de Gescartera.

Otros datos relevantes del sondeo es que la mayoría de los encuestados cree que Felipe González sigue mandando en el PSOE; un hecho que para el editorialista de El Mundo indica que Rodríguez Zapatero no está siendo capaz de hacer creíble la renovación que dice encabezar. “Como sugería ayer mismo–afirma El Mundo- un artículo de Fernando Savater, la mano de González se aprecia demasiado en las últimas decisiones políticas, en particular el giro en el País Vasco”. Por cierto, a pesar del tono descaradamente favorable a ese giro del periodista de El Mundo encargado de informar de los resultados de ese sondeo, lo cierto es que los datos del mismo indican que, de los encuestados pertenecientes al electorado socialista, sólo el 28,1 por ciento se muestra favorable al acercamiento a los nacionalistas.