Los investigaciones sobre el robo de cerca de 300 kilos de cocaína y hachís del depósito policial de Cádiz apuntan a que los ladrones entraron con llave al inmueble y luego practicaron un butrón en la pared del habitáculo en el que se guardan los estupefacientes incautados, según el SUP.
Francisco Camacho, portavoz del Sindicato Unificado de Policía (SUP) en Cádiz, ha explicado que "muchas personas" tenían la llave que daba acceso al inmueble, ya que allí está ubicado también el parque móvil en el que se estacionan los vehículos oficiales de la Subdelegación del Gobierno y de la Junta de Andalucía.
Según recoge Efe, la cerradura de esta puerta no había sido forzada, lo que avala la hipótesis de que los ladrones tenían la llave y luego practicaron un butrón en la pared del habitáculo en el que se guardan los alijos intervenidos por las fuerzas de seguridad en la provincia de Cádiz, de donde tomaron los cerca de trescientos kilos de droga.
Las investigaciones, según Francisco Camacho, cuentan con el testimonio de varios vecinos del inmueble que aseguran que en la noche del viernes al sábado, cuando supuestamente se cometió el robo, escucharon dos o tres veces las alarmas de seguridad, que están conectadas con una central de alarmas subcontratada y que, al recibir el aviso, debería haber alertado inmediatamente al Cuerpo Nacional de Policía, lo que no ocurrió ni en ese momento ni posteriormente.
Las cámaras de seguridad, según la misma fuente, tampoco sirvieron de mucho ya que los ladrones las desviaron hacia la pared para que no captaran sus movimientos.
"Conocían muy bien el lugar"
Todos estos datos estarían en la línea de las declaraciones que días atrás hizo el jefe superior de Policía de Andalucía Occidental, Miguel Rodríguez Durán, quien aseguró que "los que robaron la droga conocían muy bien el lugar". También el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, ha señalado que todo hace "intuir" que "hay personas cercanas a la casa, al parque móvil y al ámbito del dispositivo" implicadas en el robo.
El depósito, ubicado a unos cien metros de la Comisaría Provincial de Policía, tenía una ventana abierta, pero ésta sólo se puede abrir desde el interior, lo que hace suponer que los ladrones necesitaron utilizarla para llevarse la droga. La Policía, que lleva las investigaciones sobre este robo con absoluto mutismo, espera que las pesquisas para identificar y detener a los ladrones den pronto resultados, tal y como recientemente ha comentado el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa.
Ulloa confirmó el pasado miércoles que las investigaciones avanzaban "en buena línea", que ya había identificada "gente sospechosa" y que, por ello, esperaba que pronto se puedan dar "buenas noticias" sobre la resolución del caso.