
Los Mossos d'Esquadra han detenido a un monje cisterciense de la abadía de Poblet, en Tarragona, tras la denuncia de un turista alemán que le acusa de haberse propasado con una niña de cinco años a la salida de una misa en el monasterio el pasado 15 de agosto, festividad de la Asunción de la Virgen. El turista realizó una fotografía que sería la prueba del supuesto abuso.
Según dicha denuncia, mientras un monje hablaba con la madre de la niña, el detenido habría aprovechado para abusar de la criatura en un contexto en el que estaban presentes más personas. Se da la circunstancia de que la familia de la presunta víctima ha decidido no presentar denuncia.
El abad, Octavi Vilà, ha mostrado la predisposición de la comunidad a colaborar con las autoridades judiciales y policiales y ha decidido prohibir cautelarmente que el monje, que lleva en el monasterio desde 1998, ejerza cualquier actividad pastoral o abandone la clausura. También ha reclamado que se respete la presunción de inocencia.
En paralelo, se ha informado a la Congregación para la Doctrina de la Fe en el Vaticano y emitido una nota en la que la comunidad apunta que "queremos mostrar nuestra solidaridad y apoyo a todos aquellos que se puedan sentir afectados con estos hechos, particularmente a la familia de la menor". También se manifiesta "el compromiso y la voluntad de luchar contra todo tipo de abusos en la Iglesia".
Este es el primer caso investigado en el monasterio de Poblet, a diferencia de lo ocurrido en la abadía benedictina de Montserrat, donde han menudeado las denuncias por abusos.

