El cambio de Gobierno tras la celebración de los próximas elecciones generales del 23 de julio desalojaría a Dolores Delgado de la Fiscalía de Memoria Democrática y Derechos Humanos en apenas 3 meses.
Delgado fue propuesta la semana pasada por su íntimo amigo, el fiscal general del Estado Álvaro García Ortiz, a pesar de que la mayoría del Consejo Fiscal no se mostró favorable a la designación, al considerar que existía causa de incompatibilidad. Todo ello porque la pareja de Delgado es Baltasar Garzón, que posee un despacho y una fundación especializadas en Derechos Humanos.
Fuentes jurídicas consultadas por Libertad Digital afirman que "si el Gobierno cambia y se nombra a un nuevo fiscal general del Estado, éste sometería el nombramiento de Delgado a un pronunciamiento en el Consejo Fiscal por supuesta incompatibilidad. La decisión final sobre la incompatibilidad la tomaría el Consejo Fiscal y previsiblemente, Delgado sería cesada después de permanecer apenas 3 meses en el cargo".
"Cabe destacar que el fiscal general del Estado cesa en sus funciones automáticamente cuando cambia el Gobierno, aunque si volviera a ganar el PSOE, Álvaro García Ortiz podría volver a ser elegido. También, puede ser directamente derogada la Ley de Memoria Democrática por el nuevo Ejecutivo y de esa forma, desaparecería esta Fiscalía especializada", apuntan.
Las mismas fuentes consultadas por LD destacan que "Delgado podría ser sancionada además por una falta muy grave al haberse presentado al cargo de fiscal de Memoria Democrática y Derechos Humanos a pesar de su incompatibilidad derivada por sus lazos afectivos que le unen con Garzón", añaden.
En este contexto, el artículo 66 del Ministerio Fiscal señala que las sanciones que se pueden imponer a los fiscales por faltas muy graves cometidas en el ejercicio de sus cargos son: "Traslado forzoso a Fiscalía con sede separada, al menos, en cien kilómetros de aquella en que estuviera destinado; suspensión de hasta tres años; o separación" de la Carrera Fiscal.
"Delgado también podría ser cesada si alguno de los tres aspirantes al puesto, o bien las asociaciones fiscales presentan un recurso que prospere ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo. Existen precedentes de nombramientos anulados por desviación de poder como en el caso de Delgado. El problema es que el Supremo posiblemente tardaría más de un año en resolver el recurso, mientras que si cambia el Gobierno y cesa el actual fiscal general, Delgado sería apartada con mayor rapidez de sus nuevas funciones", concluyen.
Las actuaciones de Delgado "inspiradas" en Garzón
La Asociación de Fiscales (AF) solicitaba este lunes a la ministra de Justicia Pilar Llop que no dé traslado al Consejo de Ministros de la propuesta de nombramiento de Dolores Delgado como fiscal de Sala de Memoria Democrática y Derechos Humanos o, subsidiariamente, en caso de haberlo hecho ya, dé traslado al Consejo de Ministros de esta petición a fin de que no acuerde el citado nombramiento, por concurrir causa de nulidad de pleno Derecho.
En su escrito, la AF recordaba que "es hecho público y notorio que la Exma. Sra. doña Dolores Delgado mantiene una relación sentimental con don Baltasar Garzón Real, no puede obviarse la actividad profesional que este último desarrolla fundamentalmente a través de dos personas jurídicas: ‘Ilocad, SL’ cuyo objeto es el asesoramiento jurídico y la defensa letrada y, la que aquí más interesa. La ‘Fundación Internacional Baltasar Garzón’ conocida como FIBGAR, acrónimo que la fundación usa y de la que el Sr. Garzón es su presidente. Cualquier actuación o doctrina salida de la Fiscalía de Memoria Democrática podrá entenderse inspirada en los postulados del Sr. Garzón y producida en beneficio del mismo, sea de manera directa o indirecta".
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