Primera consecuencia de la sentencia del Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) que priva de inmunidad como eurodiputados a Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí. El expresidente de la Generalidad prófugo no asistirá este lunes al pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo. Teme ser detenido y extraditado a España.
Nada más conocer la sentencia del TGUE, Puigdemont aseguró que acudiría al pleno a pesar de las "dudas" sobre su inmunidad. Puigdemont se mostró desolado, pero también desafiante cuando afirmó el pasado miércoles que la contundente desestimación de sus recursos no le impediría cumplir con sus obligaciones como eurodiputado en suelo francés. Sin embargo, este lunes ha anunciado que prefiere quedarse en Waterloo al abrigo de las autoridades belgas que desplazarse a Estrasburgo.
No hay constancia de que la fiscalía del Tribunal Supremo y el magistrado Pablo Llarena hayan concluido los trámites para emitir una nueva euroorden de búsqueda y captura, pero a Puigdemont no le ha convencido la respuesta de la cámara europea sobre su situación.
Críticas al Parlamento Europeo
El prófugo ha escrito al respecto en Twitter que "a estas horas debería estar viajando a Estrasburgo para asistir al pleno del Parlamento Europeo. Esperábamos una respuesta asertiva del Parlamento sobre nuestra inmunidad de desplazamiento, ambiguamente cuestionada en la sentencia del TGUE, pero todo lo que hemos recibido es que llegado el caso 'tomará las medidas disponibles para defender cualquiera de las inmunidades a que puedan tener derecho en ese momento'. Es decir, más ambigüedad".
En un extenso trino, Puigdemont considera que la cámara europea no le ofrece garantías de que no le ocurra como en Cerdeña, cuando fue detenido por las autoridades italianas. El temor de Puigdemont es que el proceso sobre su extradición pase a Francia, país más acostumbrado a colaborar con España que Bélgica.
De modo que la legislatura europea podría haber acabado ya para Carles Puigdemont y Toni Comín (Clara Ponsatí no corre peligro de ser detenida porque sólo se le acusa de desobediencia), encerrados en Bélgica a la espera en el mejor de los casos de un largo contencioso entre el Tribunal Supremo de España y la justicia belga.