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La prensa de un vistazo

"Iban a pedir la independencia y han pedido un traductor"

Naturalmente, la prensa de papel se ha quedado para envolver el pescado. Sánchez también se ha zampado al temido Puchi.

Naturalmente, la prensa de papel se ha quedado para envolver el pescado. Sánchez también se ha zampado al temido Puchi.
Miriam Nogueras y otros diputados de Junts llegan al Congreso. | EFE

El Mundo

"Puigdemont lleva al límite su poder para controlar a Sánchez". "Si Junts rompe las negociaciones, pese a la confianza de los socialistas en el papel del expresidente, explorarían la vía canaria dando un asiento a los nacionalistas vascos. Todo sigue abierto". Esta era la versión en papel. En realidad, a estas horas, "Sánchez amarra la presidencia del Congreso pactando con Junts y ERC el uso del catalán en la Cámara e impulsando una ley de amnistía". Sánchez será presidente y Armengol presidirá el Congreso. Fin del cuento.
El editorial comenta la comparecencia de Sánchez de ayer, en la que rezumó odio, una animadversión inusitada contra Feijóo y con muchas ganas de venganza. Fue realmente desagradable. "Tras cargar contra el PP, exigió a Feijóo que deje de «presionar» al Rey y se postuló para someterse a una investidura que, a día de hoy, resulta inviable sin el respaldo de Junts". Editorial antiguo, ya tiene el respaldo de Junts.

Arcadi Espada debe haber estado de vacaciones en algún país civilizado y lejano. Dice que PP y PSOE "podrían haber propiciado, por ejemplo, que el representante de una tercera fuerza alcanzara la presidencia". O sea, Vox. "Y la elección del presidente y de la propia Mesa del Congreso podrían haber traducido también, y hasta con elegancia, la inédita situación política de que un vencedor electoral no disponga del suficiente apoyo parlamentario. Separando este acuerdo institucional de la crítica investidura se habría subrayado la relativa autonomía del legislativo y devuelto una higiene de neutralidad a los debates en la Cámara".

El aterrizaje ha sido duro. "La depravación de la política en España lo ha impedido. Es desmoralizador que ni el PP ni el Psoe hayan incluido tal acuerdo transversal entre sus numerosas ofertas y cábalas. Y hayan aceptado, por consiguiente, que el prófugo Puigdemont se convierta en el principal actor de la legislatura, incluso antes de que la legislatura haya comenzado". No pluralices. La depravación proviene, con mucha diferencia, del sanchismo.

El País

"PSOE y Junts acercan posturas pero el acuerdo está en el aire". Caliente, caliente. Obviamente, el periódico ultrasanchista tenía información privilegiada. "Junts alcanza un principio de acuerdo con el PSOE para facilitar que Armengol presida el Congreso".

Análisis exprés de José Marcos. "El vértigo que se había extendido por el PSOE y que amenazaba con truncar la euforia en la que los socialistas llevan instalados desde el 23-J se ha disipado con la decisión de Junts, a poco más de hora y media del inicio de la Constitución de las Cortes, de facilitar la investidura de Francina Armengol como presidenta del Congreso y, por extensión, del control de la Mesa del Parlamento con una mayoría progresista". ¿Había vértigo? Este mal bicho de Sánchez no respeta ni a los suyos, mira que no decirles que todo era comedia y que lo tenía todo bien atado.

Elsa García de Blas también hace un análisis exprés regodeándose en la frustración del PP. "No parece haber suerte para el PP. El partido conservador esperaba que una carambola, fruto de las altas exigencias de Junts al PSOE para acordar, le granjeara la presidencia del Congreso".

"El preacuerdo de Junts con el PSOE para la presidencia del Congreso rompe con esas expectativas y allana, en cambio, una investidura de Pedro Sánchez, lo que deja a Feijóo con el pie cambiado en el intento de ir él a una investidura con el argumento de que ha ganado las elecciones generales". Tendremos Sánchez para la eternidad. La única solución es que Cataluña se independice. Porque hace años que nos gobierna Cataluña.

Estefanía Molina habla de Vox. "Hay un sutil clima de opinión sobre que la formación de Santiago Abascal ha sido un escollo para que el Partido Popular alcance el gobierno de España esta legislatura". "Primero, porque en nuestro sistema electoral la derecha solo saca ventaja si va unida". "Segundo, porque el PP no puede ya pactar ni siquiera con el PNV —menos aún con Junts— por culpa de la intransigencia territorial de Vox en la ecuación". El PNV pactaría con quién fuese. Su problema es que Bildu le está comiendo la tostada. Pues menudos son, vendería a su abuela por un plato de lentejas. "Así que Vox ha pasado de ser la solución a ser parte del problema para nuestra derecha patria". Para llegar a Moncloa, sí que lo es. Precisamente por Cataluña, que es siempre la que manda en España. Yo no sé por qué se quieren ir, si todo son ventajas. Ya nos gustaría a muchos que se fueran con viento fresco.

"Caretas fuera: es porque Vox amaga con dejar de ser útil por lo que algunos pueden tener la tentación de acabar con la ultraderecha; no porque su ideología les haya escandalizado alguna vez, ni vaya a hacerlo a estas alturas de la política". Tenemos a Podemos en el Gobierno. Estamos curados de espanto sobre ideologías.

ABC

"Sánchez vende a Junts lo mismo que a ERC hace un año". Y parece que Puigdemont se lo ha comprado, según las últimas noticias.

Sostres se descojona de Puigdemont el duro. Sánchez le ha doblegado con facilidad. "Iban a pedir la independencia y han pedido un traductor, querían sentarse a «negociar con el Estado» y han pedido dos tickets para un tour por sus cloacas, y querían «cobrar por adelantado» para conformarse con unos pagarés con la firma de Pedro Sánchez, como si eso tuviera algún valor". Sobreestimamos a Puchi, no ha aguantado ni el primer envite.

"Puigdemont continúa siendo el mismo señor de pueblo vanidoso y agrandado que cambió de coche bajo un puente el 1 de octubre de 2017 o huyó a Bélgica en lugar de defender la independencia que él mismo había declarado, en su absurda y diminuta guerra de botones con Esquerra". Y en la que ni él ni los suyos han creído nunca.

"El presidente y su equipo ganarán si entienden que en los próximos meses no van a hablar con un prófugo o con un «president a l'exili» sino con una esposa que quiere que «me vuelvas a enamorar»". Eso está hecho. "Por el referendo y la independencia, que ni se preocupe. Ya hicieron esa piñata, lo dejaron todo perdido y tuvimos que fregar nosotros". Pero si ellos no quieren la independencia, para qué, si ya mandan en toda España. "Ahí está la Mesa del Congreso, socialista y constituida «con los que quieren romper España», y que al final sólo buscaban que les lleváramos al teatro en una estrellada noche romántica". Fanfarrones.

Girauta también tuvo la desgracia de ver ayer a Sánchez. "Sánchez es Sánchez, no vale la pena lamentarse de su jactancia, de sus lemitas, de su mala idea ni de sus proyecciones, que hasta cinco minutos antes del debate con Feijóo ni siquiera sabía lo que eran. Fuera quejas. Él mismo es la jactancia corporeizada, un mero emisor de lemas, una mala idea y una proyección". "Él concita cada sed de venganza cuando todos han olvidado de qué se vengan". "No hay lírica posible en el contradiós sanchista, que amenaza con perpetuarse. Pero sí podría haber épica en el modo de enfrentarse a él". Lo hemos intentado todo, Girauta, todo, y nada da resultado.

La Razón

El titular en papel mejor ni lo pongo, sería ridículo. "ERC votará a favor de Armengol (PSOE) y Puigdemont negocia hasta el final su preacuerdo". Marhuenda, está todo ya negociado, no intentes despistar a tus lectores. "La seguridad con la que el actual presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, da por hecho que repetirá en La Moncloa invita a pensar en lo peor", dice el editorial en relación al inaudito mensaje lleno de odio y sed de venganza de ayer. "Con todo, lo más preocupante es que sean las minorías separatistas, que entre todas ellas apenas suman el 6,5 por ciento de los votos, quienes tengan en sus manos la estabilidad del país al que quieren trocear". Y no caerá la breva de que piren.

"Se nos dirá que los resultados electorales son los que son y que una coalición de gobierno sostenida por una veintena de partidos tiene toda la legitimidad democrática y, por supuesto, así es. Pero, también lo es que los españoles eligieron como ganador al Partido Popular, con 16 escaños de ventaja sobre un candidato socialista que había marcado públicamente a lo largo de la campaña electoral graves y claras distancias con Bildu y Junts, los dos partidos que, según todos los indicios, tienen es sus manos el futuro de Pedro Sánchez". Para lo que ha servido mejor dejar de repetir eso. Además, Sánchez ya felicitó ayer a Feijóo, con toda su mala baba, que es mucha. "Nos encaminamos hacia esa legislatura de los separatismos". Pues la misma en la que estábamos ya.

En España

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