El Gobierno sigue aprobando casi semana a semana nuevos paquetes económicos destinados a la modernización de las Fuerzas Armadas. El último de ellos ha tenido lugar este martes, en la celebración del Consejo de Ministros, en el que se ha dado luz verde a la compra de nuevos sistemas de misiles contracarro, munición de artillería y granadas de mortero por un montante económico superior a los 530 millones de euros.
El contrato de mayor valor, con una cifra de 285 millones de euros, va destinado al suministro de 168 sistemas de misiles contracarro Spike LR2, una evolución de los Spike LR ya en servicio tanto en el Ejército de Tierra como en la Infantería de Marina. Se trata de un sistema de quinta generación con guiado electroóptico, que facilita el guiado inmediato del misil a unas coordenadas específicas.
El Gobierno mantiene que "la obsolescencia de los sistemas utilizados hasta el momento hace que deban ser reemplazados por otros más modernos como los que ya se encuentran en servicio en muchos de los ejércitos de nuestros aliados" y asegura que "esta adquisición permitirá la interoperabilidad de sistemas y la reducción del coste del ciclo de vida de los mismos".
El segundo contrato por valor económico es el relativo a la compra de la munición de artillería de campaña de 155mm, un tipo de munición que ha estado enviando en los últimos meses a Ucrania para apoyar al país frente a la invasión rusa, pero que también es muy necesaria para la operatividad de las brigadas mecanizadas y acorazadas del Ejército de Tierra, que la emplean tanto en obuses como en cañones. El importe es de 150 millones de euros.
La referencia del Consejo de Ministros recuerda, asimismo, que "debido a compromisos internacionales, debe mantenerse a disposición de la NATO Reaction Force (NRF) una unidad de obuses de calibre 155 mm, para ser proyectada a cualquiera de los escenarios de operaciones en la que se encuentre desplegada, así como para participar al nivel de agrupación táctica".
El tercer gran contrato aprobado, por un importante de 96 millones de euros, es el destinado a la adquisición de granadas de mortero de 60 milímetros, 81 milímetros y 120 milímetros para las unidades del Ejército de Tierra, que son empleadas para la realización de ejercicios tácticos de preparación de la fuerza, pero que también formar parte del material de las unidades cuando son desplegadas en el exterior.
El Consejo de Ministros también ha aprobado la adquisición de repuestos de vehículos Iveco del Ejército de Tierra (camiones, vehículos, ambulancias y blindados Lince) por un importe económico de 29,7 millones de euros, además de la compra de un sistema pesado de apertura de brechas y levantamiento de campos de minas por un valor de 13,2 millones de euros.
Base de Córdoba y Operación Campamento
Por otra parte, el Gobierno también ha aprovechado el encuentro de ministros para declarar como "Zona de interés para la Defensa Nacional" los terrenos principales donde se asentará la futura Base Logística del Ejército de Tierra (BLET), a las afueras de Córdoba. Una declaración que afecta a una superficie de 84,94 hectáreas tanto en su limitación en superficie como a lo relativo a su espacio aéreo.
En lo que a terrenos se refiere, también se permite al Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (INVIED), un órgano dependiente de Defensa, enajenar siete parcelas en la zona de Campamento en Madrid, con una extensión de 1,6 millones de metros cuadrados, para vendérselos al SEPES (Entidad Pública Empresarial de Suelo), dependiente de Fomento, por un valor de 271,9 millones de euros.