Tras los indultos y la amnistía, llega "la normalización política". O lo que es lo mismo: el blanqueo definitivo de Puigdemont. De fugado a actor principal de la política española y con una interlocución privilegiada con el presidente del Gobierno.
Sánchez ya no lo oculta. Se reunirá "muchas veces" con Carles Puigdemont y con Oriol Junqueras según ha confirmado en una conversación informal con periodistas en la tradicional copa de Navidad de Moncloa.
El jefe del Ejecutivo ha evitado desvelar el cuándo y dónde . Solo que, en este proceso de normalización, habrá "varios encuentros" con los dos golpista aunque "lo lógico" es que el encuentro se produzca una vez que se apruebe la Ley de Amnistía. Sánchez no teme un castigo electoral por este encuentro y recuerda que, en estas últimas generales, tras los indultos sacó un millón de votos más.
Los jueces no declararán en el Congreso
En lo que difiere del separatismo es en llamar a los jueces a declarar ante las comisiones de lawfare. Sánchez ha avanzado que el PSOE votará en contra de la propuesta de Junts para que Llarena y otros magistrados testifiquen en el Congreso.
Lo que parece más inmediato es una crisis de Gobierno para relevar a Nadia Calviño que sale rumbo al BEI. "La última semana de diciembre o la primera de enero", ha afirmado Sánchez que se ha negado a aclarar quién será el sustituto