
El Mundo
"El núcleo duro de accionistas de Telefónica confía en que Sánchez no la politice". Ingenuos, eso es imposible. "Aunque en Alemania o Italia el Estado participa en sus compañías de comunicaciones, tanto los antecedentes de un Gobierno que ha colonizado toda clase de instituciones —y que ya generó una crisis de gobernanza en Indra— como la presencia en su seno de un partido populista invitan a la inquietud. El riesgo estriba en que la operación abra el camino a un indeseable intervencionismo económico", dice el editorial. Si es que cuando anda Sánchez detrás no te puedes fiar ni un pelo .Cada paso que da es visto con desconfianza.
Raúl del Pozo dice que la gente está mosca. "Hay mucha gente que opina que esta legislatura empezó mal y puede acabar peor, y el deber de los ciudadanos y de la prensa es decirlo. Muchos piensan, desde la izquierda y la derecha, que esto tiene muy mala pinta".
Y ahora van a por la prensa. "Una parte de los medios de comunicación tienen posturas contrarias a la marcha del Ejecutivo y este los ha denunciado como trumpistas, corrosivos, basados en la mentira y la manipulación de la derecha. Quizás los periódicos han dejado a las redes el cuarto poder, pero leerlos aún sigue siendo un vicio del hombre libre", defiende Raúl.
"Sin periodismo libre no hay democracia y tampoco habría Europa. Y no han sido solo los medios españoles los que han criticado el compadreo, la impunidad con los secesionistas, la amnistía, el ataque a los jueces, la malversación a cambio de votos, sino grandes periódicos europeos y americanos los que han advertido el comienzo del caos que se inicia con las embestidas del Gobierno a la separación de poderes". ¿Qué esperábamos? Es la dictadura que salió de las urnas.
El País
"Sánchez y Feijóo se cruzan reproches tras pactar una reunión abocada al fracaso y al choque". Lo cierto es que nadie sabe para qué se reúnen. ¿A qué ha venido ese capricho de Sánchez? Una total pérdida de tiempo. "Pese a todos sus reparos, Feijóo ha accedido a verse con Sánchez y evitar el desgaste que le estaba provocando su negativa a hacerlo"· Desgaste para la trompetería mediática del Gobierno, a los demás, ni fu ni fa. "En las redes sociales circulaba estos días un vídeo de una entrevista suya en TVE, cuando era presidente de Galicia, en la que afirmaba que siempre se reuniría con el presidente del Gobierno si este le convocaba. "Salvo que esté ingresado en la UCI, iría, porque es mi presidente del Gobierno y es mi obligación", decía Feijóo". Se refería a un presidente del Gobierno normal, no a un sádico psicópata que ha levantado un muro contra él y la mitad de España.
"Sánchez presume del "éxito" en Europa para acallar las críticas a sus pactos con el independentismo y Bildu. El presidente alerta de que los "enemigos" de la UE están "sentados" en el Congreso de los Diputados, en alusión a Vox". Sí, ayer el presidente nos castigó con una chapa larguísima, mentira tras mentira, insulto tras insulto, chulería tras chulería. En las redacciones no veíamos el momento de poder poner la tele en silencio. Gestitos y morritos cuando le apuntaba la cámara. Fue una auténtica tortura.
Sobre Telefónica, dice el editorial que "el cambio de política de Pedro Sánchez busca blindar empresas capitales para la economía española, pero tiene también sus riesgos: que el Estado condicione las decisiones de pura gestión o que coloque en el consejo a perfiles inadecuados". Ah, ahí no hay cuidado, pondré un amiguete, de eso podemos estar seguros.
ABC
"La SEPI necesita de una inyección de al menos 1.600 millones para tomar el 10% de Telefónica". "Feijóo exigirá a Sánchez que controle a Sumar para retocar el artículo 49". ¿A Sánchez? El que se tiene que controlar es el presidente, Sumar solo son sus criados.
Pedro García Cuartango dice que "Sánchez es un político maquiavélico que domina el arte de medir los tiempos. Es un maestro de las estrategias para fabricar relatos y desconcertar a sus adversarios", un embustero manipulador. "La hipótesis de esta columna es si no habrá conseguido engañar a los independentistas en la ley de amnistía". "El Supremo tiene la posibilidad de mantener la inhabilitación de Junqueras y, probablemente, frenar la vuelta de Puigdemont si, por ejemplo, considerara que el perdón de la malversación contraviene la legislación europea en materia de lucha contra la corrupción. Todo está abierto". Tratándose de Sánchez nada es impensable.
La Razón
"Junts se abre a llegar a pactos en el día a día con el PP". "Puigdemont impone el pragmatismo: de Sánchez quiere la amnistía y la consulta, pero no acepta el veto del PNV a Feijóo". Pues para una moción de censura, ¿por qué no? Se trata de un bien mayor. "Sin la presión de una moción de censura ni de elecciones realmente gravosas para sus intereses, el líder socialista «se fuma un puro», según describen en el PSOE andaluz". Sí, le sale chulería y sobrería por todos los poros, no hay quien le soporte. Si al menos tuviera un poco de educación.
Sobre la reunión, dice el editorial que "la opinión pública no debería caer en demasiadas expectativas de un cambio en el actual tono de enfrentamiento entre los líderes de las dos principales formaciones políticas nacionales, entre otras razones, porque el dirigente socialista ya ha dicho por activa y por pasiva que pretende agotar la legislatura de la mano de los grupos nacionalistas que respaldaron su investidura". Ya, no nos hacemos ilusiones de que Sánchez rebaje el tono agresivo contra los que no le votan. "De hecho, no se entiende la insistencia de Sánchez en reunirse con Feijóo. La única explicación posible es que La Moncloa haya calculado los beneficios políticos de hacerse una fotografía entre el presidente y el jefe de la oposición, que normalice ante la población una situación tan anómala como la que vive España, por más que sea dudosa su utilidad". Ni eso. No se entiende porque Sánchez no quiere reunirse con Feijóo, quería ponerle en la diana para que sus radios, periódicos y televisiones se pasarán la semana insultándole y presionándole hasta que pasara por el aro. Como dice Marhuenda, "el único objetivo de su interlocutor es que se rinda o machacarle con el apoyo inestimable de la propaganda monclovita". Y así va a ser toda la legislatura.
José Antonio Vera dice, con razón, que Sánchez fue ayer al Congreso a "atacar a Alberto Núñez Feijóo haciéndose la víctima. De suerte que, según su teoría, mientras que el gallego insulta, él padece. Y va y se lo cree". Qué envida los que no tiene la obligación de escuchar a este patán. "Sánchez habla de dialogar pero obligando a hacerlo con sus reglas y sólo sobre aquello que le interesa. Lo hace además como el pistolero altanero que dispara primero y acusa al muerto de provocar". "Tras la vil investidura, el presidente está aún más altivo". Al menos se ha quitado la careta. Ya todo el mundo sabe, incluidos los sanchistas, que un dictador y un déspota, lo peor que le ha pasado a España desde el franquismo. Y lo que nos queda por ver cómo no nos venga Dios a ver.

