Mantener la mayoría de tres quintos en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) como exige la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) para nombrar a los magistrados del Tribunal Supremo será una condición sine qua non para renovar el Gobierno de los jueces.
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ofreció el pasado viernes al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que la Comisión Europea supervise las negociaciones en un nuevo intento para intentar renovar el CGPJ después de cumplir 5 años con su mandato prorrogado. El Ejecutivo socialista aceptó dicha propuesta.
Fuentes conocedoras de la negociación consultadas por Libertad Digital afirman que "en el Partido Popular hay poco optimismo de que este nuevo intento de renovar el CGPJ prospere. En primer lugar, la Comisión Europea tiene que contestar si acepta ser la supervisora de la negociación, que no mediadora. En segundo lugar, el PP no se fía del PSOE porque los socialistas liderados por Sánchez traicionan siempre en las negociaciones".
"En este contexto, el partido de Núñez Feijóo exigiría como condición sine qua non para renovar el CGPJ que se respete la mayoría de tres quintos que exige la Ley en el CGPJ para poder designar a los magistrados del Supremo. El objetivo es evitar que los socialistas cambien la mayoría exigida para cubrir las vacantes existentes en el Alto Tribunal con magistrados afines. Dicha exigencia se incluiría en el mismo paquete de negociación para renovar el Gobierno de los jueces, ya que el Ejecutivo podría modificar dicha mayoría tras pactar", añaden.
El artículo 630 de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) establece que "los acuerdos de los órganos colegiados del Consejo General del Poder Judicial serán adoptados por mayoría absoluta de los miembros presentes, salvo cuando esta Ley Orgánica disponga otra cosa o cuando se trate del nombramiento de Presidentes de Sala y Magistrados del Tribunal Supremo, Presidente de la Audiencia Nacional y Presidentes de los Tribunales Superiores de Justicia en cuyo caso se requerirá una mayoría de tres quintos de los miembros presentes. Quien preside tendrá voto de calidad en caso de empate". No obstante, la competencia para realizar nombramientos del CGPJ quedó suspendida tras la reforma efectuada por el Gobierno al encontrarse en funciones.
Las mismas fuentes consultadas por LD apuntan que "la lista de 20 vocales del nuevo CGPJ se repartiría a partes iguales entre socialistas y populares (10 y 10) y que además tendrían que elegir a un presidente de consenso. La lista de los 20 vocales prácticamente estaría cerrada ya que se mantendrían los mismos nombres que se manejaron en el último intento de renovación del año pasado. No obstante, para elegir al nuevo presidente del Consejo se podría optar por un perfil técnico".
Escepticismo en el CGPJ
Tal y como publicó este diario, en el CGPJ consideran que hay que leer la letra pequeña del pacto entre socialistas y populares porque puede ser una trampa. La clave es si los socialistas consiguen o no una mayoría en el seno del Consejo para poder elegir a jueces afines en los puestos vacantes del Tribunal Supremo, la Audiencia Nacional, los Tribunales Superiores de Justicia y las Audiencias Provinciales.
El objetivo del Gobierno es controlar la Sala Tercera del Supremo (Sala de lo Contencioso-Administrativo) encargada de fiscalizar las decisiones del Ejecutivo y la Sala Cuarta (Sala de lo Social) competente para dirimir los procedimientos relacionados con el ámbito laboral. Además, si el nuevo Consejo tuviera una mayoría de vocales del sector izquierdista y se cambiase la exigencia de tres quintos para elegir a los magistrados del Supremo, el Ejecutivo de Sánchez podría cubrir las 24 plazas vacantes que hay en la actualidad en el Alto Tribunal. El PSOE podría colocar así a jueces jóvenes para controlar el TS durante muchos años y por tanto, daría igual la composición de los siguientes Consejos.
Póngase en contacto con nosotros en investigacion@libertaddigital.com