
La visita de la delegación de Igualdad del Parlamento Europeo en plena polémica por la ley del ‘sólo sí es sí’ ha sentado como un jarro de agua fría al Gobierno, al que, tal y como resumen desde Vox, "le ha salido el tiro por la culata". La razón es que, cuando hace meses la Eurocámara aprobó este viaje, lo hizo con la intención de analizar la Ley Integral de Violencia de Género de cara a la futura directiva europea que se prevé aprobar en este ámbito. Lo que no esperaban entonces es que la visita coincidiera con la reducción de penas a cientos de violadores por culpa de la polémica norma impulsada por Irene Montero.
"Estaba pensada para una promoción de la legislación ideológica de Igualdad a tres meses de las elecciones", explica Margarita de la Pisa, quien sin embargo, constata que la "preocupación" de las eurodiputadas por "el efecto irreversible del ‘solo sí es sí’" ha hecho que este asunto haya monopolizado prácticamente todas las reuniones, eclipsando así la campaña de autobombo que auguraba el Ejecutivo.
Así lo certifican también tanto la popular Rosa Estarás como la representante de Ciudadanos -y ex del PSOE- Soraya Rodríguez, quien ha reconocido que "todos los sectores" con los que se han reunido les han manifestado una "preocupación importante" tanto por esta ley como por la Ley Trans. A pesar de sus declaraciones, y de las que han ido realizando los colectivos aludidos, PSOE y Podemos han tratado de defender lo indefendible: que éste no ha sido el tema central de la visita y que no todo han sido críticas.
El enfado de PSOE y Podemos
Como colofón al viaje, el Parlamento Europeo había convocado este mediodía una rueda de prensa en su sede de Madrid. Allí, la jefa de la delegación, la polaca Elżbieta Katarzyna Łukacijewska, haría un resumen de los encuentros que las eurodiputadas habían matenido estos días con las ministras de Justicia e Igualdad, jueces y organizaciones feministas, y respondería a las preguntas de todos los medios.
A pesar de que su comparecencia inicial fue muy medida, las incansables preguntas de todos los periodistas por el ‘solo sí es sí’ desvelaron que efectivamente la polémica ha estado presente en todas las reuniones y que todos los colectivos, y muy particularmente los jueces, les habían mostrado su gran preocupación. "El daño a España es irreparable", les llegaron a decir los magistrados.
Visiblemente enfadada, la eurodiputada socialista daba réplica en los pasillos."Se ha instrumentalizado esta misión", denunciaba Lina Gálvez. "¿A quién acusa?", le preguntábamos directamente desde Libertad Digital. Sin embargo, Gálvez no tenía claro si apuntar al PP o a los propios medios de comunicación que, según se quejaba, habían ido todos a una.
Lo curioso de este asunto es que la información parte toda del mismo sitio: el Parlamento Europeo. No en vano, días antes de la visita, su propia web colgaba una nota oficial bajo el siguiente titular: "Visita de eurodiputadas a Madrid para analizar leyes del "solo sí es sí" y dependencia y lucha contra trata". Y a continuación apostillaba: "Una delegación del PE viaja a Madrid la semana próxima para evaluar las leyes sobre consentimiento sexual y dependencia y la lucha contra el tráfico de personas y la explotación sexual". Es decir, que, según la Eurocámara, la visita sí tenía como misión someter a examen la polémica ley impulsada por Irene Montero.
El duro informe que se avecina
A pesar de la pataleta, las eurodiputadas han confirmado que efectivamente habrá informe al respecto, aunque vaticinan que tardará más de lo previsto, precisamente por la "controversia" que ha generado la visita. Lo que dirá el escrito es hoy una incógnita, aunque si en algo coinciden en apuntar todas las integrantes de la delegación es que abogará por la reforma que aun hoy está en el aire.
La rectificación la pide hasta la propia representante de Podemos, Eugenia Rodríguez Palop, quien ha defendido que es "mentira" que Irene Montero mantenga una postura inmovilista. "La ministra nos ha dicho que ha presentado hasta seis propuestas de reforma", ha desvelado, aunque cuando le hemos preguntado si alguna de ellas contemplaba volver a elevar las penas, ha echado balones fuera."Yo no las conozco y ella no las ha desarrollado", se ha justificado.
La exsocialista Soraya Rodríguez, ahora con chaqueta naranja, ha añadido además la recomendación más importante que contendrá el mencionado informe: que los países europeos que vayan a reformar sus legislaciones para fortalecer el consentimiento tengan claro que "no es preciso rebajar las penas" y que lo que ha sucedido en España es "una mala práctica legislativa".
En este sentido, la popular Rosa Estarás -la más enfadada con la manipulación que PSOE y Podemos pretendían hacer de la visita- ha insistido en que lo que ha hecho el Gobierno español es "el mejor ejemplo de lo que no hay que hacer". "No se puede hacer una ley sin escuchar a nadie; no se puede hacer una ley omitiendo informes; pero es todavía más grave perserverar en el error después de cuatro meses", ha insistido



