Las listas electorales de Bildu que incluyen casi medio centenar de terroristas, siete de ellos condenados por asesinato, han levantado ampollas en la parte socialista del Gobierno, cuyos miembros huían este miércoles de la prensa al ser preguntados por este asunto. Al silencio de Pedro Sánchez en la interpelación de la portavoz parlamentaria del PP, Cuca Gamarra, durante la sesión de control, se sumaban después hasta cuatro ministras en los pasillos del Congreso.
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, la titular de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y la de Educación, Pilar Alegría, se paraban para atender gustosas a la prensa al ser preguntadas por asuntos de actualidad relacionados con sus carteras pero se marchaban a toda prisa al escuchar el término "Bildu" en boca de los periodistas, que preguntaban por las candidaturas de los etarras.
También la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, fingía un encontronazo casual con la vicepresidenta Yolanda Díaz cuando atendía a los medios para zafarse de la pregunta sobre el partido del terrorista Arnaldo Otegi. Ni siquiera la portavoz proetarra, Merche Aizpurúa, atendía esta mañana a la prensa, a los que suele responder gustosamente en otras ocasiones.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, optaba por salir en defensa de Bildu al pedir "respeto" por el partido mientras sus socios de ERC aseguraban a través del portavoz Gabriel Rufián que "ETA desapareció hace tiempo" y lo que es necesario combatir es al "fascismo" que todavía perdura, refiriéndose a Vox.