La Moncloa vuelve a rescatar su plan para cambiar las mayorías del CGPJ y tener el control de la justicia. Ya lo intentó en una ocasión, pero se llevó una reprimenda de la Comisión Europea. Ahora, el escenario es propicio. El Parlamento de Estrasburgo se disuelve y el Ejecutivo comunitario entra en funciones.
La portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, lanzaba este martes una especie de ultimátum desde la sala de prensa de la Moncloa. "Es deseable llevar esta renovación con un importante apoyo parlamentario", añadía en clara referencia al PP mientras ponía el foco en la intermediación del excomisario de Justicia, Didier Reynders, y ahora la vicepresidenta de la Comisión, Vera Jourova, cuyos plazos ya han caducado salvo que pidan "un prórroga". Ni palabra de hacer una concesión a Génova 13 que, a cambio de renovar el órgano, exige una ley de despolitizacion.
Alegría pedía a los periodistas "no llevarles a un segundo escenario" pero abría la puerta "si hay bloqueo" a barajar otros escenarios. Cuando le preguntaban si contemplaba la opción de Sumar, que pide reducir las mayorías cualificadas para un acuerdo y que baste con una suma absoluta, la ministra sentenciaba: "Es una medida que se puede valorar"
A su lado, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, mostraba su satisfacción y, haciendo una particular interpretación de la Constitución, añadía que "la justicia emana del pueblo". Un textual que, si bien figura en la Carta Magna, no tiene la literalidad de mayorías que quiere darle la líder de Sumar.
Buen ambiente
Ni una palabra del resto de planes de "regeneración" en el primer Consejo de Ministros tras el amago de Sánchez de dimitir. "No puedo trasladar las conversaciones pero creo que ayer fue muy elocuente el grito de alegría", rememoraba la ministra portavoz en alusión a los chillidos que se escucharon de fondo cuando Sánchez anunció que continuaba. Pilar Alegría pedía "sosiego para eliminar la crispación y el fango" pero no hacía autocrítica. "Hoy estamos mejor que ayer", terciaba Yolanda Díaz.
El Gobierno dejaba clara su idea de regeneración al avalar la continuidad del presidente del CIS, José Félix Tezanos, pese al sesgo de sus encuestas. Es más, Alegría las elogiaba y citaba, además, las de El País, El Diario.es y El Periódico, todos ellos medios pro-gubernamentales, como ejemplo de buenos sondeos.