Con la Constitución Española del año 1978, los españoles se dieron la mano, las antiguas enemistades quedaron atrás y los exiliados de la guerra volvieron a su país. España afrontaba con ilusión la vuelta de la democracia con una monarquía parlamentaria votada por todos los españoles. La situación del país era muy buena, pero poco a poco se ha ido perdiendo poder adquisitivo y lo que es peor, la sociedad que años atrás se dio la mano ahora parece estar rota.
La crispación comenzó con el 15 M y ha ido in crescendo hasta llegar a cotas insospechadas hace años. Esto le viene muy bien a Pedro Sánchez. En la crispación es dónde mejor se mueve el presidente del Gobierno, pero la cosa no queda ahí, Carlos Cuesta explica por qué la crispación favorece a Sánchez.
Además de la crispación, las mentiras, el engaño... son el deporte favorito de Pedro Sánchez. Una, dos, tres... y se podría seguir así hasta perder la cuenta. Eso pasaría contando cuántas mentiras ha dicho Pedro Sánchez. El presidente se ha dedicado a ir uno a uno por los medios de comunicación afines al Ejecutivo que preside para decir que él "no miente, cambia de opinión", un argumento que desata las risas entre la oposición y la ciudadanía.