El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, comparece a partir de las 11.00 en el Senado para explicar la postura de España ante el fraude electoral de Nicolás Maduro en Venezuela, que se niega a reconocer la aplastante victoria de la oposición. El Gobierno de Pedro Sánchez se pronunciará, por primera vez, sobre la crisis después de que EEUU y la UE hayan reconocido a Edmundo González como ganador de los comicios.
El Partido Popular intentará cercar al ministro para que admita la victoria de la oposición y, con ello, crezca aún más la presión sobre Maduro, antes de reclamar en el Pleno del Parlamento Europeo un reconocimiento explícito de su derrota y la comparecencia de José Luis Rodríguez Zapatero, que sigue desaparecido. La portavoz, Alicia García, exigirá explicaciones por su silencio y la expulsión de la delegación del PP que acudió a Caracas para la jornada electoral.
"Sánchez no puede ser el aliado de Maduro en la UE y su silencio está provocando que ejerza ese papel", denunció ayer la vicesecretaria del PP, Carmen Fúnez, en una rueda de prensa desde Génova. Previamente, Alberto Núñez Feijóo defendió en una entrevista en Cope la necesidad de que España tome partido a favor de los venezolanos, la libertad y la democracia.
Albares acude cuando ya han transcurrido más de dos semanas desde las elecciones sin que haya habido un pronunciamiento oficial por parte de España, más allá de pedir la publicación de las actas electorales. En todo este tiempo el expresidente ha guardado un escandaloso silencio, a pesar de ser el máximo representante de los supuestos observadores internacionales que iban a velar por la limpieza del proceso.
España sigue sin admitir el fraude o respaldar oficialmente a Maduro, a pesar de la creciente presión internacional para que el mandatario chavista entregue el poder. Una postura que, según avanzan los días, se traduce en un amparo implícito al régimen venezolano y que puede perjudicar los intereses de los ciudadanos del país ante la UE, dada la influencia de nuestro país en Iberoamérica.
Crece la represión chavista
Mientras Pedro Sánchez sigue sin pronunciarse, crece la represión contra los venezolanos que siguen jugándose la vida al salir a la calle a protestar contra el chavismo. En los últimos días más de una veintena de personas han sido asesinadas y decenas detenidos o desaparecidos.
Miles de venezolanos aguardan para salir del país, en la que ya es la mayor crisis humanitaria que ha vivido un país sin la existencia de una guerra. Un éxodo que lleva ya años afectando a los países del entorno, lo que habría influido para que gobiernos de izquierdas alineados con Maduro no hayan amparado esta vez su farsa y pidan una negociación, aunque excluyen a la principal líder opositora, María Corina Machado.