
El PSOE volvió de vacaciones con un nuevo golpe de efecto de Pedro Sánchez en una Ejecutiva más larga de lo prevista, unas tres horas, en las que el secretario general anuncio que este sábado habrá un Comité Federal para convocar el 41 Congreso del PSOE.
En un principio, se anunció para el 15,16 y 17 de noviembre pero "motivos logísticos" se celebrará los días 29, 30 de noviembre y 1 de diciembre. La FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias) ya había reservado el recinto sevillano de Fibes para un congreso de policías locales. Fuentes de Ferraz añaden la dificultad de encontrar "trenes y hoteles" para esas fechas, debido a la premura con la que se ha convocado todo.
Tres horas de debate
El PSOE es un hervidero de comentarios de cara al Congreso. La expectación en las federaciones es máxima y nadie se quieren mojar de momento. "Vamos a ver", coinciden en varias direcciones autonómicas. En el centro del debate, está el concierto catalán firmado entre PSC y ERC para investir a Salvador Illa.
Dentro de la Ejecutiva, el grueso de las intervenciones versaron sobre la importancia de ver un socialista al frente del Gobierno catalán y de lo que supone para la política de "distensión" . "La gente tenía ganas de hablar", aseguran algunos asistentes sobre la catarata de intervenciones que siguieron a Sánchez.
No se concretó mucho más sobre la financiación aunque Sánchez dejó algunas píldoras en su intervención a puerta cerrada. El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno mencionó la necesidad de abordar en serio la financiación, dejando de lado la emoción.
Más federal pero menos autonomía para Madrid
La novedad fue su énfasis en atacar al PP por practicar el llamado "dumping fiscal" en comunidades como Madrid . La vicesecretaria general, María Jesús Montero, que también es la ministra de Hacienda, no quiso detallar más pero emplazó la necesidad de una reforma global del sistema.
Fuentes del partido anuncian que la reforma de la financiación será "de un diseño federal". En el Gobierno, apuntan de la necesidad de tener más recursos, que se podrían sacar con una "armonización" fiscal que impida a comunidades, como Madrid, bajar determinados impuestos o bonificar otros como puede ser Sucesiones. Una propuesta que gustaría a ERC y que podría tranquilizar a las bases socialistas.
Retando a los críticos
A falta de lo que presente María Jesús Montero, en su comparecencia en el Senado este miércoles, en el PSOE creen que la mejor manera de cerrar el debate interno, que lleva varias semanas centrado las críticas internas, es en el Congreso Federal. Tras la Ejecutiva, la portavoz del partido, Esther Peña, emplazaba a los críticos que lleven una propuesta.
"Ahí será el lugar más idóneo para que puedan participar", ha asegurado la portavoz de la Ejecutiva. Los estatutos del PSOE aseguran que, tras la convocatoria oficial del Congreso, las agrupaciones provinciales podrán elevar en los próximos 20 días las mociones que se debatirán en el cónclave. Queda por ver si las federaciones críticas, como la aragonesa cuya ejecutiva regional ha rechazo el concierto por "lesivo", dan la batalla interna.
El Comité Federal, un adelanto
Un primer anticipo se tendrá este sábado en el Comité Federal. En este órgano interno están representadas las distintas federaciones y sus barones. De los dos presidentes autonómicos que le quedan al PSOE bajo el régimen común, Page y Barbón, sólo está prevista la asistencia del castellano manchego. Fuentes de su entorno anticipan que "seguramente" esté presente aunque no quieren confirmarlo con tanta antelación. En cambio, el asturiano ya ha excusado su asistencia porque es la previa del día de su comunidad y se celebran algunos actos institucionales.

