El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page ha vuelto a arremeter contra el secretario general de su partido y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por las políticas que este lleva a cabo en el Ejecutivo y sus constantes cesiones al separatismo, aunque no ha especificado ninguna medida que tenga pensado llevar a cabo para parar estas. "Una cosa es tener el Gobierno y otra gobernar", ha espetado el líder de los socialistas castellanomanchegos en referencia a Sánchez.
"El poder vale en la medida que cumples con los fines que has prometido, eso es gobernar; y una cosa es tener el gobierno y otra gobernar", ha explicado Page antes de aseverar que la coalición que mantiene al líder socialista en La Moncloa está saliendo "cara" en términos económicos —porque "cada uno pide lo suyo"— y de estabilidad debido a que la "estrategia" que se sigue es "circunstancial" y no tiene como razón de ser realizar verdaderas políticas progresistas.
De hecho, según ha asegurado este lunes en una entrevista en Cuatro, algunos dirigentes de su propio partido están cuestionando los principios ideológicos del PSOE: "Quizás, en esta última época, es cuando más se están sometiendo a tensión los cimientos". Una situación en la que él se ve a sí mismo como uno de los dirigentes que se encuentran realizando un "trabajo de resistencia" para proteger los "cimientos" del partido.
La "concepción" de España, en duda
En este mismo sentido, ha apuntado a que el PSOE "por primera vez en muchísimo tiempo" está poniendo en cuestión la concepción de Estado que tiene España, aunque, para él, "los cimientos de la organización no han cambiado" todavía. "Se están poniendo en cuestión elementos centrales como la concepción de España: o la falta de concepción de España, hay algunos que simplemente no la tienen en la cabeza", ha subrayado Page.
En otro orden de cosas, el presidente castellanomanchego ha criticado la relación parlamentaria del PSOE con Junts aseverando que, desde su "óptica socialista", no entiende que Sánchez llegue a pactos con los de Carles Puigdemont, a quien ha calificado de "extrema derecha". "Tienen derecho a pedir la independencia y hacerlo, pero si para algo surge la izquierda es para luchar contra el egoísmo, y el independentismo, este y el que sea, no deja de ser la expresión más depurada y, a veces más radical del egoísmo colectivo", ha incidido.
Por ello, el presidente socialista de Castilla-La Mancha se ha mostrado en contra de sacar adelante unos nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE) —que llevan prorrogados desde 2023— si es que estos han tenido que ser negociados con Puigdemont. Una posición que ha defendido al mismo tiempo que ha expuesto que "no es lo correcto" seguir prorrogando los que ahora mismo se encuentran vigentes, que corresponden a la legislatura pasada.