El panorama demoscópico de esta semana tiene tanto una parte de política autonómica como otra relacionada con la nacional y ambas merecen un análisis.
Se trata, además, de los últimos sondeos cuyo trabajo de campo es previo al apagón, lo que los hará muy útiles a la hora de compararlos con los próximos, en los que pueda verse el efecto que lo ocurrido el pasado día 28 pueda tener, o no, en la intención de voto de los españoles.
Para empezar, las últimas encuestas publicadas recientemente sobre elecciones autonómicas en distintas regiones de España describen un patrón similar: el PP sube en los territorios en los que gobierna, incluso allí donde tiene la mayoría absoluta como en Madrid, mientras que Vox aguanta o incluso mejora sus resultados en comunidades autónomas como Aragón o la propia Comunidad de Madrid.
Sin embargo, en Castilla y León Vox cae con bastante fuerza –pierde un cuarto de su electorado si comparamos con las elecciones de 2023–, un resultado no falto de lógica después de los problemas internos que ha tenido la formación y que han pasado incluso por el adiós del que ha sido su líder regional, Juan García–Gallardo.
Además, por lo que a la política nacional se refiere, este lunes El País ha publicado también una encuesta, elaborada por su empresa demoscópica habitual, 40dB, en la que pronostica que en unas hipotéticas elecciones generales el PP estaría experimentando una fuerte subida de 1,3 puntos en sólo un mes. Además, el mismo sondeo predice una caída algo más suave de Vox, de siete décimas, que aun así es muy significativa, ya que el partido de Abascal había experimentado unas subidas muy fuertes en la segunda parte de 2024 y lo que llevamos de 2025 manteniéndose en sus máximos en año.
La bajada de Vox coincide, además, con algo que la mayor parte de los analistas pensaba que podría dañar al partido de Abascal: el rechazo, incluso entre el electorado más cercano al presidente americano, de las últimas medidas o políticas de Donald Trump, especialmente de los aranceles.
En esta encuesta resulta muy interesante el estudio de las transferencias de voto entre partidos, ya que se ve como el PP mejora su posición ante Vox: no sólo pierde menos votantes frente a los de Abascal que el mes anterior, sino que también consigue captar a más personas que votaron a Vox en 2023 y ahora está dispuesta a hacerlo por los populares.
Pero es que además, al mismo tiempo que el PP mejora su posición a su derecha, logra seguir arrebatándole un porcentaje significativo de votos a los socialistas: si en abril los populares habían convencido a un 5% de los que votaron por Sánchez en 2023, este mes de mayor ese porcentaje no sólo no decrece sino que crece ligeramente, llegando al 6%.
Sánchez ya ha dejado claro que un medio crítico como este es un obstáculo. Nos halaga pero necesitamos tu ayuda para demostrarle que lo que dice es cierto. Hazte socio del Club LD.