El presidente de la Generalidad de Cataluña, Salvador Illa, ha reafirmado este viernes el empeño del Gobierno catalán y del Partido Socialista en lograr que el catalán, el gallego y el euskera sean reconocidos como lenguas oficiales en las instituciones de la Unión Europea. "No pararemos", ha declarado Illa, subrayando su intención de seguir presionando a Bruselas pese al reiterado rechazo de los socios europeos.
La insistencia de los socialistas en esta iniciativa identitaria llega en un momento en que varios países miembros de la UE han expresado dudas legales y financieras sobre el impacto de una medida que, más allá de su carga simbólica, supondría una complicación burocrática y un coste adicional para el conjunto de Europa.
Mientras los gobiernos europeos priorizan la eficacia y la cohesión institucional, el Ejecutivo catalán, con el respaldo del PSOE, continúa utilizando la política lingüística como herramienta de presión política, alimentando el debate nacionalista en plena escena internacional.