A estas alturas del evento, me da igual que la/le imputen, disputen, juzguen, absuelvan o la traten como a la Pantoja, que esa sí trabaja, aunque no sea yo quien escuche su lírica. Pero la opinión la tengo formada. Es/son unos chorizos de 3 al 4º. Todos.

Nadie se cree que se pueden tener esos bienes, con sus ingreso después de impuestos, aunque fueren buenos y superasen el valor de su productividad. Nadie se cree que cualquiera puede llamar a un trincón de la política con poder para dar y tomar discrecionalmente, contarle una milonga bonaerense y llevarse una pasta gansa, sin factura, ni nada, por nada.

Solo alguien de una familia como la que es. Una familia bastante patosa e irresponsable de lo que representa, porque lo representa y que es lo que hace que siga representando lo que representa y empezamos a cuestionar severamente.

Luego podrán pedir perdón o lo que quieran, incluso devolver la pasta gansa, que dudo, pero han hecho lo que han hecho. Que es extorsión o no, que no ha habido violencia, que estaban encantados de darles para que pudiesen tener un gran patrimonio, me da igual. Son choricillos alcahueteados, por su padre, el stablishment político que también vive del choriceo y unos cuantos jueces y fiscales trepa o posiblemente trincones también.

Que este país está podrido, no cabe duda y lo demuestran los casos de corrupción de las altas esferas y que estamos experimentando y sufriendo una conspiración para hacer borrón y cuenta nueva y que todos los trincones del puto ‘stablishment’ este se queden con su botín, se vayan de rositas y sigan trincando sus hijos y sucesores es más que sospechoso.

Por eso me jode tanto pagar impuestos y me cisco en todo lo suyo, aunque sea como último y único recurso.