Hay que tener cara o jeta para proclamarse honrado el que ha montado el tinglado de los Eres en Andalucía.
Hay que tener cara o jeta o ser tonto hasta la extenuación para cubrir el despilfarro, pagar la independencia y tapar la corrupción catalana a costa de Restospaña.
Hay que tener cara o jeta para que la casa real critique al juez y aplauda al fiscal.